El Papa Francisco envío un videomensaje para esta Semana Santa en el que reconoció que todos estamos llevando una vida inusual para evitar cualquier posible contagio y contener, en cuanto sea posible, la propagación del coronavirus.
Envió un saludo de solidaridad, empatía y esperanza a todas las personas: a los enfermos de esta pandemia, a los familiares de quienes han perdido un ser querido, a los héroes anónimos que colaboran en los hospitales y entregan voluntariamente lo mejor de ellos para sanar y aliviar a quienes sufren, a quienes pasan apuros económicos y están asustados por el negro futuro que se avizora, a quienes se encuentran prisioneros y se angustian por el estado de salud de los suyos, a los niños y ancianos que se les escatiman muestras de amor y de ternura, a quienes no tienen nada que comer, carecen de hogar y no pueden obedecer la recomendación de quedarse en casa para evitar la propagación del virus.
En fin, es imposible citar todas las necesidades que padecen infinidad de hermanos nuestros, por lo que Bergoglio hizo la siguiente exhortación: “Intentemos, si podemos, aprovechar este tiempo lo mejor posible: seamos generosos; ayudemos a quien lo necesita en nuestro entorno; busquemos, a lo mejor por teléfono o en las redes sociales, a las personas que están más solas; recemos al Señor por los que pasan por esta prueba en Italia y en el mundo. Aunque estemos aislados, el pensamiento y el espíritu pueden llegar lejos con la creatividad del amor. Es lo que hace falta hoy: la creatividad del amor”.
Finalmente, el Pontífice invitó a actuar responsablemente para vencer esta pandemia y compartir todos juntos la esperanza de un tiempo mejor: “no es una ilusión, es una esperanza”, subrayó.
¿Vivo la creatividad del amor?
rfonseca@noroeste.com
@rodolfodiazf
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