|
"Editorial"

"La tragedia"

""
20/01/2019

    Editorial

    Pobladores haciendo una fiesta en torno a un camión accidentado cargado de mercancías, ganado o refrescos, cada quien carga lo que puede, a pie, en carretillas o en vehículos de motor.
    La rapiña a todo lo que da en un negocio quemado y los saqueadores buscan lo que sea entre los productos que no fueron alcanzado por el fuego.
    Una matanza de animales en plena carretera, cerdos, vacas o cualquier animal sucumbe ante los golpes o cuchillazos que les propinan habitantes de algún pueblo cercano que con frenesí buscan llevarse una pieza grande de carne.
    Son escenas que, de tan habituales ya están convertidas en anécdotas en cada rincón de México.
    Un ducto de combustible perforado y emanando a presión chorros de hidrocarburo, mientras cientos de habitantes buscan llenar la mayor cantidad de bidones, garrafones o el recipiente que tengan a mano del preciado líquido.
    Una fuente de combustible que no alcanza a caer porque se gasifica en el ambiente e impregna todo al rededor, incluyendo a los seres humanos que se agolpan sobre el manantial de gasolina.
    En ninguno de estos casos impera el sentido común de evitar una detención, cuidar la salud o... prevenir un accidente.
    ¿La pobreza provoca ignorancia, o es al revés?, ¿es la falta de instrucción lo que empuja a las personas a delinquir con tal de obtener algo de lo que carecen?
    La condena a las víctimas de la explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, acre y despiadada sobre todo en redes sociales, denota la distancia entre varias realidades que vive México, quienes se erigen como garantes de la legalidad y quienes pasan por sobre la ley con tal de tener algo.
    La pobreza en que vive una mayoría en los pueblos de México es una tragedia que ya debería ponérsele fin, si no se hace, el país vivirá recurrentemente duelos como el presente.
    La ignorancia de la ley no exime al infractor del castigo por el delito, dice la máxima jurídica.
    La ignorancia es, en México, el mejor caldo de cultivo para quienes quieren contar con huestes dispuestas a inmolarse por un bien anhelado.
     

    Esa es la tragedia nacional.

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!