"Las ‘cheneladas’ de los seis de Morena"

alexsicairos@hotmail.com


Palestino y la madriguera que proyecta

El viernes salió a escena un solitario Diputado con el discurso también ermitaño que anuncia la creación del nuevo grupo parlamentario en el Congreso del Estado, mismo que funcionaría dentro de la fracción legislativa del Movimiento Regeneración Nacional, sin más argumento que el de no fastidiarse unos a otros. En realidad, Jesús Palestino Carrera y los otros cinco que dice representar, lo que buscan es legitimar la traición a la llamada Cuarta Transformación sin pagar por ello el correspondiente costo político.

Detrás del letrero de “no molestar” que Palestino Carrera quiere colocar entre los legisladores leales a Morena y el grupo bajo sospecha de haber emigrado fácticamente a la bancada del Partido Revolucionario Institucional se oculta el necesario cargo de conciencia por morderle la mano al hombre y las siglas que los llevaron a las curules. Nunca habrían logrado estar allí sin el impulso que les dio el fenómeno electoral generado por Andrés Manuel López Obrador y el partido de este.

O podría ser el mismo pedido de no importunar que se les hace a las camareras en los hoteles, en este caso para mantener en secreto la cohabitación con intereses ajenos a los que planteó la coalición “Juntos Haremos Historia”, la que el primero de julio de 2018 arrastró a muchos incompetentes a ocupar alcaldías y diputaciones.

Si es verdad que el Diputado que dio la cara lo hizo también a nombre de Rosa Inés López, Fernando Mascareño, Flora Isela Miranda, Mariana de Jesús Rojo y Apolinar García, entonces el Congreso tiene ahora a varios “Cheneles” que son imitadores del hoy asambleísta José Manuel Valenzuela López, quien ha ocupado cargos de elección popular brincándose de un partido a otro, sin pizca de identidad ideológica.

El “Chenel” Valenzuela, maestro del trapecismo político, en los casi nueve meses que lleva en funciones la 63 Legislatura local ha refrendado una y otra vez la incongruencia partidista pero escenifica la mejor sátira del poder. Llegó al Congreso tras ganar la votación en el Distrito 09 cobijado por las siglas del Partido Sinaloense y en cuanto ocupó su lugar en el salón de plenos brincó a la bancada del Partido de la Revolución Democrática para dos meses después autodeclararse independiente.

Sin embargo, aún a José Manuel Valenzuela habría que pedirle disculpas por compararlo con los diputados desleales a Morena.  El “Chenel” sí ha ganado votaciones que lo han llevado varias veces a la Alcaldía de Angostura y ahora a la Cámara estatal y, pese a la transfiguración política, mental y de personalidad (un día se disfraza de Miguel Hidalgo y al siguiente de San Martín de Porres), es factor de rentabilidad electoral.

¿Pero quién es Jesús Palestino o, más bien planteado, quién sería hoy sin Morena y sin AMLO? En la encrucijada de estar a la altura de un momento de la historia que exige rectitud y compromiso social en la representación popular, ha optado por el atajo de la sospecha al desprenderse de las decisiones compactas de la bancada de Morena, a la que según pertenece.

Él y aquellos a los que en cuyo nombre habló proponen la comodidad de ser integrantes del proyecto político que se considera el más provechoso al menos de aquí al 2021, pero dicha pertenencia ha de ser correspondida con la traición. Ven venir el procedimiento de sanción de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia y en lugar de hincarse a rezar, se unen para disfrazarse de víctimas de sus propios actos.

Qué difícil será para Morena volver a confiar en diputados marcados por la felonía, asestada con premeditación y ventaja. Pero fingir que nada pasa al seno del otrora poderoso grupo parlamentario y dejar las cosas como están es lo mismo al autoengaño del “no molestar”, a la madriguera levantada con urgencia por los infieles, simulación que no perdonarían las masas fanáticas de la 4T.

Esto va más allá de lo cosmético pues necesita la lección ejemplar para que la gente mantenga su fe en el nuevo régimen. Nada solucionaría la liturgia izquierdista de bañar con agua bendita a Palestino y sus “cinco mártires” pues, al contrario, significa acelerar el trastorno. No puede ni debe Morena ignorar el letrero de “¡ya estamos hartos!” que los sinaloenses le comienzan a mostrar.

Reverso
Alegará “Chenel” que se trata,
De la suplantación de estilos,
Al hacer una copia barata,
Palestino y demás pupilos.
 
Quirino ya; faltan otros
El acto de sensibilidad que el Gobernador Quirino Ordaz Coppel ofrece a los desplazados por la violencia en el sur de Sinaloa, el cual se concretó con las gestiones que ofreció el Secretario de Desarrollo Social, Ricardo Madrid Pérez, para adquirir un terreno en Mazatlán donde los excluidos de la sierra construyan sus casas, necesita ahora de la parte que le corresponde al Presidente Andrés Manuel López Obrador para ir en ayuda de estas familias a las cuales la barbarie les está quitando todo. Quirino Ordaz hizo su parte y ahora falta ver qué hacen al respecto AMLO y los Senadores Rubén Rocha, Imelda Castro, Mario Zamora y los diputados federales sinaloenses.