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"Opinión"

"Los santos ciudadanos"

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11/10/2017

    Carlos Elizondo Mayer-Serra

    @carloselizondom

     

    De cara a la elección presidencial, ante el desprestigio de los políticos, una parte de la opinión pública cree que hay una alternativa: un santo ciudadano. En esta visión, mientras el político concentra todos los negativos posibles, el ciudadano es generoso y desinteresado. Los problemas del país se resolverán cuando tengamos a un inmaculado ciudadano gobernándonos.

    Sin embargo, todo gobernante es también un ciudadano. “Tiene la palabra el ciudadano presidente de la República para informar de acuerdo con el artículo 69 de la Constitución General de la República”. Así le daban el uso de la misma al titular del Ejecutivo cuando rendía su informe ante el Congreso de la Unión.

     

    Eso era antes. Hoy se cree que ciudadanos son quienes no están en el Gobierno. El Gobernador de Nuevo León, apodado “El Bronco”, fue militante priista por 33 años. Un día renunció al partido y se lanzó como candidato independiente a la Gubernatura con la bandera ciudadana. Lleva dos años en el poder. El sábado pasado se inscribió como posible candidato independiente para la Presidencia. 

    El Bronco” está lejos de ser un santo ciudadano. Es hoy un político en el poder y tiene un caudal de defectos. Es sólo formalmente independiente de los partidos políticos. Al encarnar éstos el mayor mal posible, se cree que competir sin partido político es representar al bien. Digo formalmente, porque en la práctica “El Bronco” medio gobierna con ellos. El lunes evitó ir a escuchar la crítica de sus opositores en la presentación de su informe, porque PRI, Panal y PVEM juntaron la mayoría de los votos en el Congreso del estado para darle ese privilegio.

     

    Otro independiente registrado este fin de semana, Armando Ríos Piter, es Senador por Guerrero. Llegó a tal puesto abanderado por el PRD. Margarita Zavala, quien se inscribe hoy como independiente, llevaba 33 años de militancia panista. El único de los registrados conocido y sin militancia partidista es Pedro Ferriz de Con. Les dejo a ustedes el juicio de si es un santo ciudadano, pero la mayor crítica que se le puede hacer es … que no tiene experiencia de gobierno. 

    Nada más difícil que gobernar. Trump es una muestra de ellos. Sería cómico, si no fuera tan seria la responsabilidad que tiene en sus (pequeñas) manos. Trump, para quienes les simpatizan los independientes, es para fines prácticos uno de ellos, aunque dependiente de una base conservadora y racista. Nadie puede gobernar desde la independencia absoluta.

     

    Todos los criminales que no están en el Gobierno son también ciudadanos, pero esto es lo de menos. El desprestigio de nuestra clase política y en particular de nuestros partidos políticos es enorme y ganada a pulso. Pocos individuos pueden hacer tanto daño como un gobernante con experiencia, pero corrupto. Sabe cómo robar y con ese dinero puede comprar muchas voluntades: desde los medios de comunicación y los órganos de justicia, hasta el votante, a pesar de que en el camino destruya la entidad que gobierna.

     

    Ante el descrédito del PRI, pareciera que Peña Nieto no va a escoger a su militante más reconocido según todas las encuestas, Miguel Ángel Osorio Chong. Éste les garantiza solo el voto más duro, cada vez más menos significativo. Quedan tres, el que tiene más años de militancia en el PRI, el Secretario de Salud, fue presidente de la Fundación del PRI y Subsecretario de Gobernación en los años de Salinas, parece rezagado. Aurelio Nuño, el Secretario de Educación, priista, pero es una cara joven y limpia. El que parece está impulsando Peña Nieto es el único que no es priista, el Secretario de Hacienda, José Antonio Meade. Cruel paradoja sería ver a un ciudadano sin partido, compitiendo por el partido que más tiempo lleva en el poder en México, enfrentando a independientes, los dos mejor posicionados, que han sido miembros del PRI y del PAN, los dos partidos bajo los cuales ha servido Meade. 

     

    Morena también tendrá a un ex priista como candidato, autoseleccionado por el dedo del propio candidato. Falta ver si el Frente Ciudadano toma el riesgo de abanderar a un ciudadano que no es un político en activo. Emilio Álvarez de Icaza, mucho más ciudadano e independiente que “El Bronco” o Zavala, ha decidido no buscar la Presidencia como independiente porque no quiere hacerle el juego al PRI, dijo. Creo que otra razón es la esperanza de ser el candidato del Frente.

     

    Es pronto para darle los Santos Óleos a la clase política y a sus partidos. Ya veremos a quién favorecen los ciudadanos una vez que tengan la baraja completa de opciones y sea el mero día de la votación. Falta también ver qué hacen los candidatos independientes si no tienen posibilidad de ganar y se acerca el día de la elección. Porque si así siguen buscando la Presidencia con bajas posibilidades de triunfo, contribuirán a la fragmentación del voto y a tener a un futuro Presidente con aún menor legitimidad democrática.

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