|
"Observatorio"

"Morena en Sinaloa: el día del colapso"

""
OBSERVATORIO

    alexsicairos@hotmail.com  



    De la gran coalición, a la gran colisión

    Una vez consumado el desmembramiento de la bancada del Movimiento Regeneración Nacional en el Congreso de Sinaloa, viene enseguida la dificultad para sacar adelante las leyes y reformas que la mal llamada Cuarta Transformación plantea para el estado. La entelequia del grupo legislativo compacto resultó insostenible cuando apareció la seducción del dinero, facilitada por la confrontación al seno de la fracción parlamentaria.


    A nadie se culpe sino a Morena mismo del colapso de la fuerza que estas siglas poseían en la 63 Legislatura local. La escasa militancia que tenía en Sinaloa antes de la votación del 1 de julio de 2018 llevó al partido de Andrés Manuel López Obrador a implementar la pepena de candidatos de todas las siglas marginales, pretensos inéditos para algunos de los cuales las convicciones y lealtades son mera mercancía de canje.


    Esto es lo que se tiene y nadie se diga sorprendido de lo que ocurrió el martes en la Cámara local. Desde aquel día de la elección histórica, Morena fue el barco rescatado del naufragio en Sinaloa pero puesto al mando de piratas políticos que venían a saquear la nave sin pretender llevarla a buen puerto. Esa es la causa de que el PRI, a través de seres que nunca dieron razones para confiar en ellos, logre el abordaje del navío morenista, sin brújula ni capitán.


    De los 27 diputados afines a Morena con que se instaló la 63 Legislatura el 1 de octubre de 2018, para el 18 de junio de 2019 solamente 18 pasarían la prueba del amlómetro. En ocho meses y medio la poderosa coalición electoral en que participaron los partidos del Trabajo y Encuentro Social se redujo a ser la gran colisión que vuelve añicos no solo la mayoría constitucional sino también la mayoría simple.


    Y sí, como se previó hasta la saciedad, al Partido Revolucionario Institucional, al cual pertenece el Gobernador Quirino Ordaz Coppel, le resultó más fácil de lo que esperaba la cooptación de hombres y mujeres que por accidente cayeron sentados en las curules, amparados por las siglas de Morena. El colmillo del viejo partido devoró las delirantes proclamas de la 4T y una vez harto escupió esperpentos que la representación popular detesta.

    Fue el día que en el nombre de Dios los diputados Flora Isela Miranda Leal, Rosa Inés López Castro, Fernando Mascareño Duarte, Jesús Palestino Carrera, Mariana de Jesús Rojo Sánchez, Apolinar García Carrera, Eleno Flores Gámez y Mario Rafael González Sánchez se quitaron las máscaras de Morena que, mucho se sabía, les causaban urticaria. La misma fecha en que la tránsfuga de la 4T, Karla Montero Alatorre, abdicó a la única posibilidad que le quedaba de rescatar la confianza perdida en ella.


    Llegó el momento de que Morena saque cuentas en Sinaloa. Tiene una bancada descuartizada de la que no se sabe a qué santo le reza cada integrante; carece de estructura directiva convirtiéndose en partido que existe en el protagonismo político pero como liderazgo estatal, y puede decir que es gobierno en las principales alcaldías, como lo son Culiacán, Mazatlán y Ahome, sin estar en posibilidad de presumirlo sin cierta porción de vergüenza.


    ¿Es el fin de Morena en el Congreso? Por supuesto que no. Ocurre la reconfiguración intramuros que se advirtió mucho antes del martes en el que se derrumbó como mayoría legislativa, debido a que quiso ir por el matrimonio igualitario en Sinaloa y acabó logrando el divorcio con los clanes ambiciosos que utilizaron de trampolín al partido amloísta y que nunca se pensaron como practicantes de sus ideales.
    Al final de cuentas nada cambia en la esfera local. Siguen los políticos subastando sus principios a cambio de canonjías y billetes, prosigue la sociedad al último en la lista de prioridades legislativas, las garantías constituciones desvanecen en el aquelarre del disfraz con sotanas, y el PRI hambriento de la reivindicación electoral engulle a los liliputienses del reino mal llamado Cuarta Transformación.


    Reverso


    Sinaloa siente pena ajena,
    Por aquel ‘¡ay!’ temerario,
    Que el PRI le arrancó a Morena,
    Sin matrimonio igualitario.


    El debate que viene


    En el peor momento, por la división explícita en la bancada de Morena, durante la acalorada sesión del martes donde se frustró la aprobación de los matrimonios igualitarios se le dio primera lectura a la iniciativa de reformas a la Ley Orgánica de la Universidad Autónoma de Sinaloa que después de dos años y medio en la congeladora legislativa viene a reposicionar un asunto controversial que de seguro volverá a encender los ánimos en el Congreso. La presentan los universitarios Ana Luz Ruelas Monjardín, Jorge Rubén Ibarra Martínez, Guillermo Eduardo Ibarra Escobar y Juan Antonio Lara Medina. ¿Está marcada con la misma suerte que tuvieron los matrimonios igualitarios? Por lo pronto Morena no está en posibilidad de garantizar el desenlace distinto.

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!