"Tu teléfono te espía y bombardea con publicidad"

Algunos de nosotros no podemos de dejar de sentir que nuestros teléfonos celulares monitorean nuestras conversaciones, aún cuando no estamos realizando una llamada; especialmente cuando uno recibe publicidad en línea de artículos que nunca hemos buscado en internet. Un día uno se encuentra hablando de la gastritis y otros padecimientos propios de la edad, y al día siguiente la publicidad para pepto bismol no deja de aparecer en el celular. Un día uno se encuentra hablando de conspiraciones del gobierno, y al día siguiente aparecen anuncios de televisa y López-Dóriga.

 

Cualquier smartphone puede, en teoría, realizar las siguientes operaciones sin tu consentimiento: Acceder a cámaras y tomar fotos/video, acceder al micrófono y registrar audio, subir fotos/video al internet, transmitir video en vivo, utilizar reconocimiento facial para detectar rasgos faciales o expresiones, etc.

 

De acuerdo con Edward Snowden (ex-empleado de la CIA), la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) tiene un programa llamado “Nervios Ópticos”, el cual consiste en la vigilancia a gran escala a través de las webcams. El programa está diseñado para tomar imágenes cada cinco minutos. Se estima que un 11 por ciento de las imágenes capturadas contienen “desnudez indeseable”. 

 

¿Cómo te sentirías si alguien se encontrara afuera de la ventana de tu cuarto mirando a través de las persianas? La respuesta más sensata sería llamar a la policía, sin embargo, ¿qué podemos hacer cuando todos estamos siendo monitoreados? Decimos “chale” y olvidamos que está sucediendo, seguimos con nuestras vidas e ignoramos el hecho de que estamos siendo observados.

 

Pero antes de que te pongas el sombrero de papel aluminio y te vayas a vivir como ermitaño al bosque, lo más factible es que las compañías ya saben demasiado sobre ti, y probablemente ni siquiera tu celular te está “pelando”.

 

Registros constantes de audio provenientes de infinidad de teléfonos resultaría demasiado costoso para recolectar y analizar. Todos esos megabytes de información consumirían demasiado tus datos de internet. 

 

Las compañías, en lugar de eso, utilizan los datos personales que ingresamos a las redes sociales, todo lo que publicamos y buscamos en internet (así como el de nuestros contactos), y a través de un algoritmo determinan qué publicidad es la más adecuada para cada uno de nosotros. Esos anuncios de herbalife para bajar de peso que aparecen en tu celular no son una coincidencia.

 

Google ha declarado que tiene acceso al 70 por ciento de todas las transacciones de tarjetas de crédito y débito. Junto con Facebook y otras plataformas, utilizan tecnologías ocultas para recolectar datos de ti y todos aquellos otros individuos con los que interactúas para generar un perfil exacto de cada uno de nosotros, como potencial consumidor.

 

A pesar de que Google y Facebook niegan el uso del micrófono para registrar nuestra actividad, no hay duda alguna de que tienen las herramientas para hacerlo. Después de todo, estas compañías también generan dividendos vendiendo la información que colectan de todos sus usuarios.

 

Aunque uno peque de parecer loco con teorías de conspiración, no está de más cubrir la cámara del celular con cinta y desconectar los audífonos cuando no se estén utilizando. Uno nunca sabe quién puede estar mirando, o qué está haciendo el celular mientras no está siendo utilizado. Sólo es paranoia hasta que es demasiado tarde.