"Voltear al noroeste"

El territorio que es ahora el noroeste de México ha sido siempre una zona agreste, árida en gran parte de su superficie, o lagunar, como sucede en la zona sur de Sinaloa y norte de Nayarit.

 

Las tribus partieron de esta zona a lugares más habitables, de allí nació la fundación de imperios como el mexica, eso dice la historia.

 

Con la Colonia, cuando los peninsulares ya habían españolizado el centro de la Nueva España, voltearon a ver el inmenso territorio que habían adquirido y se propusieron recorrerlo, conocerlo y habitarlo.

 

Al llegar a esta región noroeste vieron que, salvo el oro y la plata, no había mucho para ellos, y de inmediato empezaron a explotar los minerales.

 

Sin embargo, para habitarlo enviaron, en su mayoría a españoles muy pobres que solo buscaban un pedazo de tierra.

 

Con el tiempo esa tierra empezó a florecer, con los esfuerzos de los españoles primero, de los mexicanos después y de un número considerable de extranjeros que vieron en estas tierras la oportunidad de hacerla productiva.

 

Sin embargo, el noroeste siempre ha estado alejado de los pensamientos de los gobiernos centralistas.

 

Las visitas del Presidente Andrés Manuel López Obrador a Sinaloa y Nayarit, ¿obedecen a un cambio de óptica del Gobierno federal?

 

El haber escogido a Badiraguato, tan estigmatizado, usando palabras del propio Mandatario, ¿es una estrategia de desarrollo de antemano planeada?

 

Por lo pronto hay esperanzas con el anuncio de la modernización del puerto de Mazatlán y la puesta en marcha de las dos presas, la inconclusa Picachos y la naciente Santa María, que juntas estas obras beneficiarían en gran medida a la zona serrana que comprende esta área.

 

Ya el plan económico anunciado para la zona de Badiraguato-Tamazula pretende desarrollar los altos de Sinaloa y Durango, al norte.

 

Sin embargo, todo esto son anuncios bien intencionados que hacen renacer una esperanza de por fin desarrollar donde haga falta, industrializar las zonas aptas para ello y modernizar lo que ya está quedando obsoleto.

 

La zona noroeste es vital para el progreso de México, ojalá se concreten esas buenas intenciones.