"ADVIERTE INVESTIGADOR CLAROSCUROS EN TENDENCIAS DE HOSPEDAJE INFORMAL"

El hospedaje informal para vacacionar va en aumento y es una tendencia que preocupa al sector hotelero.

Tan solo en Mazatlán, se detectaron más de mil propiedades empleadas para este propósito, según la encuesta de satisfacción al turista realizada en verano del 2017 por la Asociación de Hoteles Tres Islas.

En el mismo estudio, el 15% de los encuestados habrían buscado la alternativa RB&B para hospedarse. Y estos datos se complementan con la encuesta de invierno, aplicada durante febrero y marzo de 2018, en el que se arrojó que 87 por ciento se hospedó en un hotel. Mientras el 7 por ciento rentó casa, el 3 por ciento tiempo compartido y 3 por ciento posee una propiedad.

La informalidad en el hospedaje no sólo se presenta a través de plataformas tecnológicas especializadas, también se hacen tratos a nivel interpersonal y en redes sociales.

Silvestre Flores Gamboa, doctor en gestión del turismo y académico de la Universidad Autónoma de Sinaloa, advierte que es una modalidad que llegó para quedarse y cambiar para siempre la manera de viajar y de organizar el turismo.

"Tiene su claroscuros; hay quienes han sabido aprovechar la plataforma y hacer promoción turística, pero por el otro lado, los hoteleros organizados lo ven como una competencia desleal ya que no tienen las mismas obligaciones", comentó el investigador.

Lo que sí es innegable, consideró, es que la realidad ha rebasado a las leyes vigentes, y hace falta actualizar el marco regulatorio porque hoy en día se carece de información acerca de cuántas personas ofrecen este servicio y con qué calidad.

En ese mismo sentido se expresó José Ramón Manguart Sánchez, dirigente de la Asociación de Hoteles Tres Islas.

Y alertó que la oferta de hospedaje informal pone en peligro al sector organizado del turismo al hacerlo competir en circunstancias desventajosas con particulares, que no enfrentan la misma carga tributaria y que, al no estar bajo la vigilancia de las autoridades, cometen fraudes contra los huéspedes con alta probabilidad de no ser sancionados.

"Nosotros no le tenemos miedo a la competencia, no se debe interpretar como tal. Nuestra petición como sector organizado formal es que existan las mismas condiciones para que podamos competir de manera paralela", exhortó.

Es mejor adaptarse al cambio: Investigador

Para el investigador Silvestre Gamboa, la mejor opción es adaptarse al cambio tecnológico debido a que no hay ningún indicio de que este vaya a retroceder.

Al contrario, adelantó, la modalidad de contratar servicios a particulares por medio de aplicaciones de teléfonos móviles se extiende a restaurantes, paseos, guías de turistas y otros más a cargo de la población local.

"Entre lo positivo podemos decir que es una nueva vertiente para aquellas empresas o sectores debidamente organizados y establecidos dentro de la ley para encontrar un nuevo canal de comunicación y de mercadotecnia", explicó.

Uno de los riesgos, dijo, es que no existe información sobre quiénes ofrecen este servicio, no se sabe cuántos son ni en qué condiciones.

"Lo que sí es urgente regular a través de la Ley del Turismo o del Trabajo, que se les pongan condiciones mínimas a estos establecimientos para operar, porque incluso se han presentado fraudes a los usuarios", alertó.

Hay muchas lagunas legales, por lo que en otros países, como España, están legislando para obligar a las plataformas como AirB&B a proporcionar al gobierno la información de los establecimientos que allí participan a fin de cobrarles un impuesto.

No obstante, aclaró, es importante tener en cuenta que esta es una opción que ya forma parte d ela vida cotidiana de los usuarios, por lo que no se prevé su disminución. "Al contrario, llegó para quedarse", insistió.

Una carga desigual

A pesar de las reformas a la Ley de Hacienda del Estado de Sinaloa en 2017, para cobrar el impuesto del 3% al hospedaje no sólo a hoteles, sino a quienes ofrezcan el servicio de alojamiento en casas, departamentos y a intermediarios por Internet, hoteleros advierten que persiste la informalidad y la desigualdad entre ambos sectores debido a que no hay un registro de la oferta real del hospedaje con fines vacacionales.

Mientras los hoteles pagan tarifas comerciales de energía eléctrica, agua potable y predial, los informales cubren la tarifa doméstica; y en el caso de la electricidad, con subsidio del Gobierno del Estado, ejemplificó Manguart.

Los empresarios formales, agregó, ofrecemos empleos con prestaciones de ley.

"Bienvenida la competencia, bienvenidas las nuevas experiencias y que haya para el gusto de todos, pero ¿qué va a pasar cuando esa tendencia sea la privilegiada?", cuestionó.

De no regularse a nivel federal, en el mediano o largo plazo se puede disminuir la rentabilidad del sector turístico y alejar con esto las inversiones que tanto se ha buscado atraer.

Por lo pronto, el 14 de abril de este año, el Gobierno de Sinaloa celebró un acuerdo en materia impositiva con Airbnb con el fin de recolectar ese 3 por ciento para promoción turística, a partir del 1 de junio de 2018. Sin embargo, se desconoce cuál es el padrón de establecimientos que son ofertados en esta plataforma.

Que den seguridad a usuarios: Sectur

"Son plataformas que ya existen, la tendencia ahí está a rentar casas, cuartos, departamentos..., existe en la mayor parte del Mundo y también en Sinaloa; todas las actividades son válidas mientras estén reguladas y den certeza a quienes las contratan", opinó el secretario de Turismo de Sinaloa, Marco Antonio García Castro, sobre el crecimiento de la nueva modalidad.

Reconoció que en el caso de Mazatlán, el aumento del número de turistas provenientes del Norte del país ha hecho que resulte insuficiente la capacidad hotelera del puerto, que ronda las 10 mil habitaciones, la mitad de ellas catalogadas como de 4 y 5 estrellas por su calidad.

En este año, adelantó, se agregarán al inventario de la ciudad 750 cuartos de hotel o condominios al concluir la construcción de varios proyectos, actualmente en proceso en la Zona Dorada, la Marina y otras áreas.

La oferta y el peligro en el ciberespacio

Una de las plataformas más utilizadas para la búsqueda de alojamiento en casas o departamentos es la de RB&B, donde en un rastreo para las vacaciones de verano se pueden encontrar por lo menos 300 opciones entre departamentos, casas o cuartos amueblados, con precios que topan en los 2 mil pesos por noche, donde regularmente no se limita el número de personas alojadas.

Asimismo, en las temporadas "pico" se observan letreros en carros particulares ofertando cuartos por día o semana sin ninguna regulación.

José Ramón Manguart reconoció que los precios de las plataformas, por lo general son más bajos que en los hoteles, pero también es mayor el riesgo de fraudes.

"Se han tenido reportes de fraudes, de personas que ya depositaron un pago y al llegar, resulta que nadie los conoce y se quedan volando", alertó.

La recomendación es siempre recurrir a mecanismos formales de reservación, para evitar ser sorprendidos por estafadores.

DATOS CLAVES:

El estudio realizado en 2017 para conocer la satisfacción al turista, que se realiza cada año, arrojó que el 15% de los consultados recurrieron a RB&B para encontrar alojamiento.

Las recomendaciones de Profeco:

* Verificar que la empresa o página con la que realizan el trato tenga una razón social registrada.

* Que tenga establecimiento físico para poder aclarar cualquier incidente.