"Agentes sorprendidos con víctima en patrulla llevaban placa para ocultar número de identificación"
Además de que los dos agentes de la Policía Municipal de Culiacán detenidos en flagrancia junto con otro joven, cuando trasladaban a una persona herida y privada de la libertad, llevaban una pechera, un rifle AK 47 y una placa magnética para cambiar el número de su patrulla.
Según la relatoría de los hechos que forma parte del informe policial, leído por una fiscal en el arranque de la audiencia inicial pública realizado este domingo, la víctima rescatada dio detalles sobre su rapto y la manera en que fue golpeado.
Ayer, los agentes Evaristo y Gilberto, quienes entraron con el pantalón cargo de su uniforme, fueron puestos ante una juez de control junto al joven Mario Alberto o José Antonio, quién supuestamente viajaba junto a la víctima.
La juez calificó de legal su detención después de analizar las pruebas presentadas.
Ejercen acción penal contra dos policías municipales de Culiacán por privación de la libertad
El informe policía señala que poco después de las ocho de la noche, la BOMU Rural 2 Tepuchito, un grupo conformado por elementos de la Estatal Preventiva, Municipal , Guardia Nacional y Ejército, realizaba recorridos de vigilancia por las inmediaciones de la sindicatura, cuando recibieron el reporte de hechos violentos en un poblado conocido como Caminaguato.
El reporte detallaba que denunciaban golpes y amenazas de parte de civiles que viajaban en camionetas con detalles que hacían presumir que eran patrullas policiales.
El grupo se trasladó a la zona y antes de llegar al poblado, cerca de las 20:40 horas, observaron a una patrulla de la Policía Municipal que viajaba a velocidad inmoderada, que incluso el chófer ignoró el llamado a detenerse, eludió en zig zag a tres patrullas hasta que la cuarta la detuvo.
La patrulla tenía los rótulos con la clave 506A-1 como identificación.
Dos elementos de la PEP y otros dos de la Guardia Nacional se bajaron y hallaron a Evaristo como chófer y a Gilberto como copiloto, mientras que atrás de la patrulla doble cabina se encontraron a Mario Alberto o José Antonio junto a la víctima, un joven de nombre Victor, visiblemente herido de brazos y rostro, además de un empellón en el empeine del pie izquierdo.
Además, en la parte trasera de la cabina también encontraron equipo táctico militar, como una pechera con camuflaje pixelado de color verde militar y el fusil AK 47.
Otro de los objetos encontrados que llamó la atención de los elementos fue una placa magnética con números similares en tamaño y forma de la identificación de la patrulla, pero con la cifra 1535.
Al momento de entrevistar a la víctima, el joven señaló que había sido privado de la libertad tres días antes, cuando llegaron tres hombres en una camioneta Amarok de color lila a su domicilio en la colonia Los Huertos, que lo llevaron a Culiacancito.
Dijo haber sido golpeado con palos y tablas, y a puñetazos, mientras lo amenazaban.
La víctima agregó que lo llevaron después a un rancho de donde le exigían que sacara armamento que lo acusaban de tener oculto, hasta que lo subieron a la patrulla en la que era trasladado por Evaristo, Gilberto y Mario Alberto o José Antonio.
Detalló además que antes de ser detenidos, estaba siendo golpeado por Mario Alberto o José Antonio con el fusil AK47.
Durante la audiencia de ayer, realizada de manera extraordinaria en domingo por la urgencia jurídica del caso, los abogados tanto de los agentes como del joven indiciado, hicieron hincapié en qué la versión en el informe policial homologado tenía muchas inconsistencias.
Incluso, los abogados pelearon por los detalles de la detención y cuestionaron la versión de la flagrancia.
El informe señala que la detención fue por su participación de la privación ilegal de la libertad, pero la Fiscalía centra la acusación en desaparición forzada de personas.
En diferentes ocasiones, Evaristo insistió en mover la cabeza como seña de negación mientras escuchaba los detalles del informe.
Evaristo y Gilberto, oficiales adscritos a la sindicatura de Tepuche, entraron a la sala vestidos con camiseta negra interior, pantalones cargo azul marino de su uniforme de la Policía, y botas negras sin cordones.
Mario Alberto o José Antonio vestía una camiseta negra y mezclilla.
Otra particularidad de la audiencia de este domingo fue la presencia de un par de agente de la Policía Procesal, guardia del centro de justicia de la zona centro del estado, portaban fusiles automáticos, algo que no se había visto en audiencias anteriores, además de la presencia de una patrulla de la Policía Estatal Preventiva en las afueras.
La audiencia continuará es lunes luego de que la juez decretara un receso para dar paso a la imputación de los delitos contra los acusados, el debate de los datos de prueba, la posible declaración de los indiciados y vinculación a proceso.
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