"EDITORIAL Mentes viejas perjudican al combate anticorrupción"

"El combate a la corrupción requiere mentes frescas, jóvenes que les apasione acabar con los funcionarios que abusan de la confianza de la gente"
24/01/2019 13:36

Editorial

El combate a la corrupción en Sinaloa no prosperará mientras quienes lo dirijan sean personas con el paradigma de la política añeja mexicana.

Aún hay gente que evita una acción para no incomodar al Gobernador o al gobierno. Que no va de frente porque no le gusta “pelear”. O que ve burocracia en los organismos creados para supervisar y coordinar el efectivo combate. O le incomodan las perspectivas ciudadanas.

El combate a la corrupción no inició en este país con la creación de los Sistemas Nacionales y Locales. Es una lucha de, al menos, 20 años que desde la academia y la sociedad civil se emprende. Primero fue la causa de la transparencia y acceso a la información pública, luego a los gobiernos abiertos y, en el lustro reciente, es la anticorrupción.

Sin embargo, hoy que en el país y en los estados operan los sistemas anticorrupción, vemos funcionarios que ignoran por completo el corazón del tema, pero sobre todo, carecen de espítitu para entrarle en serio. Son como cocineros sin sazón.

Un caso es el del Alcalde Jesús Estrada Ferreiro, quien incluso en el pasado participó en protestas de ciudadanos, hoy ve “bola” en la creación del Sistema Municipal Anticorrupción.

“Tenemos un órgano de control, tenemos un área de transparencia, tenemos un área de contabilidad, tenemos muchos mecanismos para estar vigilando esto, no se la verdad, tantos organismos, personas, ciudadanos, oficiales, no oficiales, no hacen más que bola”, quiso justificar, obviando que todos ellos son sus empleados. Nunca delatarían al primer circulo del Alcalde en caso de econtrar desvíos, robos o conflictos de interés.

Lo más preocupante es que sea Francisco Javier Lizárraga Valdez, secretario técnico del Sistema Estatal Anticorrupción, quien esté impulsando que los sistemas municipales no se creen.

Grave, porque crearlos es una obligación legal, segundo, es darle prioridad al combate a la corrupción y, tercero, porque deja fuera la participación ciudadana, es decir, la visión que debe hacer contrapeso al paradigma burocrático.

Como opinó Ricardo Joel Jiménez González, integrante de la coordinación nacional del Colectivo Ciudadanos por Municipios Transparentes, dijo que se debía considerar la participación ciudadana en estos esquemas o sólo se tendrían instancias nuevas con prácticas viejas.

En pocas palabras y con todo respeto, el combate a la corrupción requiere mentes frescas, jóvenes que les apasione acabar con los funcionarios que abusan de la confianza de la gente (haga su lista).