"Esteban Zamora, un panista atrevido, atrabancado y que no se andaba con temores"

CULIACÁN._ El nombre de Don Esteban Zamora Camacho es clave en la historia, en el despegue del PAN en Sinaloa.

Fallecido el miércoles 22 de mayo a los 84 años de edad, formó parte de la generación pionera, que formó a cuadros ciudadanos, que desde la Oposición, lucharían por un cambio de régimen político ante el sistema priista.

Luis Roberto Loaiza Garzón, ex dirigente estatal, recuerda los aportes de quien fuera uno de los militantes más antiguos del albiazul, a nivel nacional.

Zamora Camacho era miembro activo de este partido desde 1957. Y se mantuvo en sus filas, a pesar de las derrotas, las decepciones.

Su participación, sus intervenciones, sus piezas de oratoria, dejaron huella sobre todo en los años 80 y 90 del siglo pasado, al calor de las luchas por la defensa del voto y en contra de los fraudes electorales.

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“Las arengas de Don Esteban”, recuerda Loaiza Garzón, eran famosas, así como la columna que escribía en Noroeste, que se llamaba 'Tribuna', con muchas ocurrencias y críticas muy filosas, y aparte fue un maestro de muchosde nosotros”.

Nadie le cree, dice Loaiza, que él no sabía hablar en público.

“A mí me daba pena y estar con don Esteban en los cursos de oratoria, él nos enseñaba ciertos trucos de sacar tarjetitas, de apuntar ideas y después hacer las combinaciones de esas tarjetitas en la mente”.

- ¿Qué representa el nombre de Esteban Zamora Camacho en la vida del PAN, y en particular del PAN de Sinaloa?

Yo creo que con él se va otro de los pilares, de los panistas de los primeros tiempos del PAN en Sinaloa. Hace poco lamentamos también la partida de don Jorge Del Rincón, ahora de Esteban Zamora y se reúne con otros que también se adelantaron, como don Alberto Avilés, Héctor Estrada, Rigoberto López Alarid, Gabriel López Palomares.

Se trata, resume Loaiza Garzón, de toda una generación que fueron los maestros de la primera ola de panistas, de ciudadanos, que se incorporaron en el PAN a principios de los 80, a las campañas de Jorge del Rincón y de “Maquío”, Manuel Clouthier Del Rincón.

Este grupo de panistas, destaca, tenían el encargo de recibir a ciudadanos que buscaban el fin de los gobiernos priistas, caracterizados por la corrupción, la injusticia, la desigualdad y la impunidad, y que veían en el PAN una vía, para el cambio de régimen político.

Esteban Zamora Camacho fue fundador del periódico Noroeste, al lado del primer director Silvino Silva Lozano, desde el nacimiento del rotativo el 8 de septiembre de 1973.

“Nos daban la formación, para los que no sabíamos nada de la doctrina del PAN, y no quiero olvidar en esta tarea a Luisa Urrecha; ellos fueron los que recibieron a esa ola de ciudadanos, ellos personalmente nos daban la capacitación, la formación, y ya quedan pocos de ellos, de esa generación, como Rafael Morgan Ríos”, rememora.

De estos panistas, añade, destacaba don Esteban, con mucha pasión, mucha entrega.

Se puede concluir, considera, que es de los últimos panistas doctrinarios que quedaban en Sinaloa y el país.

Incluso hasta en los últimos días seguía colaborando en un grupo dentro del PAN, llamado “Plumas Azules”.

- Don Esteban Zamora fue de esos personajes del PAN que nunca se bajaron del barco...

Sí, incluso muere él siendo consejero nacional vitalicio, en la parte editorialista del órgano La Nación y en el consejo de Plumas Azules.

Además de la política, recuerda Loaiza Garzón, otra de la pasiones de Zamora Camacho era el periodismo.

“Era una vocación de él la política, el periodismo lo abrazó con pasión, le gustaba mucho; a él le apasionaba le gustaba mucho compartir su conocimiento”, abunda.

En su parte política, añade, fue formador del PAN.

“En la parte de periodista igual, y una faceta que nadie sabe es que era vendedor de seguros, era su profesión, vendía seguros pero también le gustaba capacitar a los nuevos agentes de seguros, se puede decir que era muy generoso, lo que le apasionaba, le gustaba que los demás supieran; en mí caso me enseñó la parte de oratoria, de articular discursos”.

Don Esteban, explica Loaiza Garzón, tuvo que emigrar a la Ciudad de México por motivos familiares y laborales.

Algo que muchos de sus compañeros periodistas, de la “vieja guardia”, dice, es su perfil combativo.

Y es que mientras la mayoría de reporteros eran “gobiernistas”, don Esteban era “anti sistema”.

“Eran los tiempós de la famosa línea oficial, muy alienada el Gobierno, y los periodistas de entonces le reconocen a Esteban esa faceta, de ser un periodista crítico, opositor, y no con falta de respeto, sino con admiración y respeto”, evoca.

Incluso, dice, se le recuerda por ser atrevido, “atrabancado”, pues no se andaba él con temores.

- ¿No le faltó al PAN hacerle homenaje, en vida, a don Esteban Zamora?

No se lo hicimos, porque ya sus venidas (a Culiacán) eran muy esporádicas, y ya en plan familiar.

Una hermana de Luis Roberto, Adriana, se casó con Felipe de Jesús, el abogado que murió en un accidente aéreo junto a Francisco Blake, Secretario de Gobernación en el sexenio de Felipe Calderón.

De ahí que los vínculos de los Loaiza con los Zamora, ambos de familias panistas, fueran estrechos.

“Sabemos que don Esteban se va en paz, se va tranquilo, eso me dice mi hermana; él estaba con mucho agradecimiento hacia su tierra, Culiacán, donde decidió que descansarán sus cenizas de por vida, por la eternidad”.