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"Mazatlán"

"Evangelización, Educación y Cultura: Betsaida"

"Columna religiosa"
22/05/2019

Padre Amador Campos Serrano

Resistencia a aceptar la persona de Jesús y su mensaje es un reclamo alusivo a Betsaida, un lugar mencionado en los Evangelios, donde hubo cerrazón para percibir sus señales realizadas. El Maestro la muestra como un lugar con un nivel demasiado bajo de aceptación a sus enseñanzas, en comparación con otras ciudades, como Tiro y Sidón.

Mencionada en las páginas evangélicas, no hay claridad en cuanto al lugar de su ubicación, a tal punto de llegar discutirse la posibilidad de la existencia de dos comunidades con el mismo nombre.

No obstante, más allá de la polémica de su pasada ubicación, el texto sagrado lo designa con el lugar de origen de los apóstoles Pedro, Andrés y Felipe y algunos autores, como Teodosio, un peregrino del Siglo 6, y Willibald, un Santo Obispo del Siglo 8, que visitó esos lugares, afirman que también es el lugar originario de los hermanos y apóstoles Juan y Santiago.

El nombre de Betsaida proviene del hebreo-arameo y está formado de las raíces Beth y Saida, cuyo significado sería el de casa de arena; algunos lo interpretan como casa de pescadores, sin duda, aludiendo a su cercanía con el Lago Tiberiades.

Flavio Josefo sitúa este lugar al este del Lago de Tiberiades o Mar de Galilea, en un lugar reconstruido por Herodes el Grande, quien le dio el nombre de Julias, en honor de la hija del Emperador Romano César Augusto.

Plinio le da otra ubicación, situándolo al lado contrario del mismo lago, en este caso el problema sería que los límites de Galilea, en ese tiempo no se extendían hasta ese lugar.

Algunos intentan simplificar la polémica, exponiendo la posibilidad de la existencia de dos lugares con el mismo nombre, no estando muy lejanos el uno del otro, siendo cercanos al Lago de Tiberiades, también llamado Lago de Genesaret.

Las evidencias arqueológicas dan cuenta de dos lugares, el Et-Tell y el Araj, como sitios posibles de su ubicación

En el sitio arqueológico de Et-Tell tiene una datación desde la Edad de Bronce hasta la Época Grecorromana; en el otro sitio, el de Araj, hay indicios de una comunidad asentada desde la temprana época romana, al encontrarse ahí objetos como lámparas y vasijas de barro, usadas en ese tiempo.

En los datos de los Textos Sagrados, en este lugar se dio la curación de un ciego, según menciona el Evangelio.

Su ceguera era de nacimiento, pero los estudiosos opinan que debió perder la vista en algún momento, pues cuando fue curado, él afirmó que veía a los hombres como árboles en movimiento, sin duda porque tenía experiencia visual de los árboles.

También es citada, en las cercanías de ese lugar, una de las multiplicaciones de los panes, cuando Jesús dio de comer a una multitud, un recuerdo muy presente en las gentes, pero el Maestro les reprocha que solo por ese hecho lo seguían y no por seguir sus enseñanzas.

Aún cuando existe un debate sobre la ubicación del sitio, Betsaida fue un lugar familiar en la vida y enseñanzas de Jesús, a tal punto de tomarlo como referencia para ejemplificar una mejor respuesta a quienes tienen la oportunidad de una mayor cercanía con Él.

 

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