|
""

"No quiero morirme sin encontrarlo: Luz"

"Lleva Luz desde el 2012 buscando a su hijo que se encuentra desaparecido y además de luchar contra el cáncer"

EL ROSARIO._ En abril del 2012, Luz recibió dos golpes que parecían mortales, en primer lugar la desaparición de su hijo seguida del diagnóstico de cáncer.

No obstante, confiesa que la esperanza de encontrar a su primogénito se ha convertido en la fuerza para sobreponerse a la enfermedad.

“Ese dolor es inexplicable, cuando pasó lo de mi hijo el 18 de abril, ya para el 30 de abril me salió cáncer que gracias a Dios ahorita lo he estado superando, pero yo no he dejado de luchar”, dijo con serenidad.

“Lo superé (el cáncer), porque yo creo que el dolor que yo tengo es más fuerte que cualquier cosa; Yo lo superé porque quiero seguir viviendo porque quiero encontrarlo, no me quiero morir sin saber dónde está mi hijo, ese sí es mi miedo”, expresó.

Con facilidad recuerda aquel 18 de abril del año 2012, cuando por última vez tubo noticias de su hijo, el día en que el dolor se instaló en su corazón y todo su ser.

“Es mi hijo y para mí no pasa el tiempo, para mí todos los días son iguales y haz de cuenta que no pasa el tiempo, yo sigo con el mismo dolor desde el primer día que no llegó a mi casa”, argumentó.

Luz reconoce que el dolor no disminuye sino al contrario con el tiempo aumente, pues siente y se repite que no es posible que esté sentada mientras que la tierra está acabando con los restos de su hijo.

Sostiene ante quienes le preguntan que si no le da miedo andar buscando y la respuesta siempre es la misma “lo que me da miedo es morir sin saber dónde está mi hijo”.

Luz, con voz inalterable expone que siempre lo ha estado buscando, sale a las calles y comunidades para preguntar a la gente, para ver quién le puede apoyar pero hasta ahorita nadie se anima o no quieren darle información.

“A mí se me hace imposible que una persona desaparezca sin saber nada, porque a mí hasta ahorita en los seis años dos meses que tiene mi hijo (desaparecido), nadie me ha dicho yo vi que se fue con fulano, se lo llevaron”.

Motivo por el cual refirió que desde hace ya algunos años ha buscado el apoyo de grupos de rastreadoras, mujeres que como ella, buscan a sus desaparecidos entre parcelas y cerros.

Concluyó que del dolor le viene la fuerza necesaria para tener ese tesón de no descansar hasta encontrar al hijo que le fue arrebatado de su lado.

Periodismo ético, profesional y útil para ti.

Suscríbete y ayudanos a seguir
formando ciudadanos.


Suscríbete
Regístrate para leer nuestro artículo
Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


¡Regístrate gratis!