"'Nosotras no podemos esperar': Mirna Medina"

En menos de cuatro meses, las Rastreadoras ya encontraron a ocho personas muertas, ninguna de la lista que tienen de familiares desaparecidos. Lo hicieron solas porque, aseguraron, no pueden esperar a las autoridades.
Mirna Medina Quiñónez, líder del grupo Las Rastreadoras de El Fuerte, explicó que la cifra de personas que buscan supera las 170, todos hombres, y originarios de El Fuerte, Choix y Ahome, que están desaparecidos desde 2010 a la fecha.
“La Procuraduría el Estado, el Gobierno federal nos han prometido apoyo en las búsquedas, y pues sí, bueno, en las reuniones que tenemos con el Gobernador son para ponernos de acuerdo en lugares, pero nosotras nos desesperamos, para nosotras el tiempo es oro, nosotras no podemos esperar”, expresó.
Las búsquedas son, en su mayoría, sin el acompañamiento de la autoridad, tampoco tienen herramientas especiales o artefactos electrónicos como los radares que fueron prometidos por la Procuraduría General de Justicia a inicios de este año.
Medina Quiñónez dijo que el grupo organizó un plan de búsqueda de desaparecidos y al mismo tiempo trazaron un mapa con los posibles paraderos de cuerpos en fosas clandestinas o escondidos entre la maleza, en donde buscan los días miércoles y domingo.
“Una de las osamentas, la primera, fue aquí en Los Mochis, y las demás en el área de San Blas, lo que es la parte sierreña de San Blas”, señaló.
Apenas ayer, el grupo de Las Rastreadoras hizo el hallazgo de una osamenta enterrada a poco menos de un metro, en San Blas, la cual estaba irreconocible debido al grado de descomposición del cuerpo.
En este año ya suman ocho osamentas, siete de ellas en la zona de la sindicatura de San Blas y una más en Los Mochis, que fueron reportadas ante el Ministerio Público local para que se inicie el análisis de ADN, de los que esperan que coincidan con el registro genético que se elaboró por la Procuraduría General de la República desde agosto del 2015.
La líder de Las Rastreadoras aseguró que en estas búsquedas se han sumado personas que no tienen familiares desaparecidos, pero que han sido movidos por el movimiento que inició desde septiembre de 2014, como protesta ante la falta de resultados de las autoridades locales.



El caso de Mirna
Mirna Medina Quiñónez es líder del grupo de personas con familiares desaparecidos en la zona norte de Sinaloa, llamado Las Rastreadoras de El Fuerte.
Su búsqueda inició desde el 14 de julio de 2014, fecha en que su hijo Roberto Corrales Medina desapareció, luego de que un grupo de personas se lo llevara en una camioneta de color negro en una gasolinera, a la entrada de la cabecera municipal de El Fuerte.
Con la desaparición de su hijo conoció a otras mujeres con familiares desaparecidos, como Karla Gómez, Rosa Elia Vázquez y Reyna Serna, que también son líderes del movimiento.