"Pulsaciones económicas"

"Salario mínimo, ¿cuál es el problema?."
06/11/2015

    Arturo Damm Arnal

    (Primera de tres partes)
    Año tras año, desde hace varios, es la misma historia: una vez que se anuncia el aumento otorgado al salario mínimo las críticas no se hacen esperar, comenzando por las comparaciones, ¿para qué alcanza el salario mínimo y qué se puede comprar con el incremento concedido?
    Durante un par de días, sobre todo los medios, sin olvidar a uno que otro político, llevan a cabo esas comparaciones, y quienes les ponen atención exclaman "¡Qué barbaridad!, ¿cómo es posible?" para, en menos de lo que canta el gallo, olvidar el asunto hasta el año entrante, momento en el cual se repetirá, con las variantes que la coyuntura demande (hoy, por ejemplo, el gasolinazo, o el incremento en el precio del trigo y, por ello, el aumento en el precio del pan), la misma historia.
    Lo primero que queda claro es que el salario mínimo no cumple con lo que, según el 123 constitucional, debería de cumplir: alcanzar "para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos".
    Independientemente del asunto, ¡no menor!, de cuáles son las necesidades normales de una familia en los órdenes material, social y cultural, queda claro que, con 51.02 pesos diarios, que es el salario mínimo promedio para 2008, resulta imposible satisfacerlas, por lo que, me parece, el mentado salario resulta anticonstitucional, en el sentido literal del término: va en contra de lo establecido en la Constitución, ¡y todo el mundo tan campante, como si aquí no pasara nada!
    (Claro que, dicho sea de paso, el primer error está en el intento de fijar legalmente el salario, mismo que debe establecerse en función de la productividad del trabajo, ¡sobre todo en el caso de quienes ganan menos!, aunque a simple vista pueda parecer lo contario.)
    Llegados a este punto la pregunta es ¿cuál es el problema con el salario mínimo? ¿El aumento otorgado o la base sobre la que se concede? Veámoslo.
    Supongamos que, para este 2008, se hubiera otorgado un aumento al salario mínimo del 100 por ciento, ¿cuál sería hoy el salario mínimo? 97.76 pesos, más que los 51.02 vigentes, pero insuficientes: con 97.76 pesos se puede comprar, solamente, el 31 por ciento de la canasta básica, integrada por 79 mercancías consideradas indispensables. ¿Cuál es el problema con el salario mínimo: el aumento otorgado o la base sobre la que se concede? Obviamente el segundo, la base sobre la que se concede, que es, literalmente, mínima: 48.88 pesos en 2007 y 51.02 en 2008.
    ¿Por qué el salario mínimo es, en México, literalmente mínimo, cuando, de acuerdo a los propósitos que le dieron origen, debería ser suficiente para la satisfacción de las necesidades básicas del trabajador y sus familiares, necesidades básicas que son aquellas que, de quedar insatisfechas, atentan contra la salud y la vida de la persona? ¿Por qué?
    Continuará.
    E-mail: arturodamm@prodigy.net.mx

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