"Reintegran a su hábitat a un ocelote y dos linces"

"Habían bajado al poblado de Estación Dimas y se encontraban debilitados, por lo que fueron resguardados y liberados en el área de la Meseta de Cacaxtla, perteneciente al municipio de San Ignacio, Sinaloa"

Un ocelote y dos linces que, al parecer, habían bajado al pueblo de Estación Dimas en busca de agua o alimento fueron rescatados y reintegrados a su hábitat dentro de la Meseta de Cacaxtla, un área natural protegida dentro del municipio de San Ignacio, Sinaloa.

La presencia de los animales fue reportada a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) por habitantes de este poblado, en el que viven cerca de 3 mil 500 personas cuyas principales actividades son la agricultura, ganadería y la pesca.

Para rescatar a los felinos, que pertenecen a una especie en peligro de extinción, se coordinaron acciones entre la Conanp y la Profepa, informó el delegado en Sinaloa de esta dependencia, Jesús Tesemi Avendaño.

Al momento de ser encontrados, los animales se hallaron debilitados, por lo que tuvieron que ser valorados médicamente.

“Se encontraron con debilidad, pero no maltratados, afortunadamente la gente ha recibido capacitación para cuidar a estas especies y optaron por reportarlos”, aseveró el funcionario.

La Profepa dio a conocer que, luego de mantenerlos en cuidado cuarentenario, se determinó su liberación, “con el propósito de evitar su improntamiento, lo que garantizaría su readaptación natural al hábitat”.

Ante esto, añadió un informe previo, se consideró el sitio más adecuado y alejado de la población al interior de la ANP Meseta de Cacaxtla.

El Ocelote (Leopardus pardali) está peligro de extinción de acuerdo con la Norma Oficial Mexicana 059 de la Semarnat. Aparece en el listado de las especies en riesgo de 2010. También en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Faunay Flora Silvestres (CITES por sus siglas en inglés).

En tanto, el lince o gato montés (Lynx rufus) se encuentra en el Apéndice II del mismo catálogo, que forma parte de acuerdos internacionales a los que México está suscrito.

Para evitar responsabilidades penales, la autoridad ambiental exhorta a la ciudadanía a no capturar estos animales ni usarlos como mascotas, puesto que son salvajes y potencialmente peligrosos, además de lo costoso de su manutención.

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