"Son mazatlecas, estudiaron en el ICO y ganan concurso internacional en Brasil"

Mariana Morán y Nallely Beltrán son dos jóvenes mazatlecas que incursionan en el mundo de la ciencia con un proyecto muy sustentable.

En la Feria de las Ciencias del Instituto Cultural de Occidente de 2017, donde se presentaron proyectos de investigación sobre salud, ecología y sustentabilidad, todos con beneficio social, estas alumnas de la clase de biología consiguieron que su proyecto concursara a nivel internacional.

Su investigación es sobre cómo la cáscara de papaya puede ser utilizada como quitamanchas de fibras textiles naturales.

Durante dos años, desde que estaban en segundo de preparatoria, representaron al ICO en las expociencias regionales, nacionales e internacionales, en donde han conseguido acreditar su proyecto para concursos cada vez más ambiciosos.

En octubre pasado consiguieron que su proyecto fuera acreditado en la Muestra TEC, una de las expociencias más exigentes de su género a nivel internacional, realizada en Nuovo Hamburgo, Brasil.

Actualmente Mariana y Nallely cursan su primer semestre de universidad, pero su proyecto realizado en la preparatoria sigue vigente en los concursos internacionales como un proyecto del ICO.

La acreditación que ganaron en Brasil les da derecho a participar en un nuevo concurso que se va a realizar en Arapiraca, en el mismo País, en octubre de 2020.

Ahí se enfrentarán con 500 proyectos de diferentes partes del mundo, informó el coordinador de Proyectos de Ciencias, Innovación y Tecnología del ICO, Rodrigo González Rendón.

El proyecto de la papaya de Mariana y Nallely ha sido asesorado por el profesor de biología Alfonso Soto.

“El objetivo es promover el amor por la ciencia, aplicación de la ciencia en la vida diaria, dar a conocer que se puede hacer ciencia desde preescolar, poco a poco se está creando conciencia en la comunidad estudiantil y entre los padres de familia, afirmó Rodrigo González Rendón.

El ICO ganó en 2015 un evento internacional con una propuesta sobre los efectos negativos que provoca el chamoy industrial.

Incluso, el producto fue retirado del Instituto Cultural de Occidente, donde se vendía a la comunidad estudiantil.

Mariana y Nallely siempre han sido estudiantes dedicadas, comprometidas y responsables, informaron los docentes que han respaldado sus proyectos.

“Nuestro proyecto surgió de la clase de biología, estábamos estudiando las proteínas y una compañera, su papá era carnicero y era muy difícil quitar las manchas de sangre (de las reses), así arrancó el proyecto 'Evaluación de extractos enzimáticos de cáscara de papaya y su uso como aditivo detergente para quitar manchas de origen proteínico'”, comentó Mariana.

“Mezclamos el extracto de cáscara de papaya con alcohol para crear un aditivo que se mezcla con un detergente. Para mí fue muy importante esta investigación, porque así descubrí mi vocación por la ciencias y estoy estudiando Biomedicina en la UAS, en Culiacán. Disfruto mucho lo que estoy estudiando”.

Nallely, por su parte, tenía claro desde antes de participar en este proyecto que su vida profesional la quería dedicar a la programación de computadoras.

“A mí me gusta mucho la investigación científica, pero lo mío es programar las computadoras, por eso estoy estudiando Desarrollo de Software en el Tecmilenio en Culiacán, para mí la investigación científica es un hobbie que me ha traído mucho conocimiento, porque la metodología científica sirve para cualquier área del conocimiento, y esa herramienta me quedó completamente clara desde que nos comprometimos con este proyecto”, dijo.