"...Y Culiacán aún humeaba"
Poco más de 18 horas después de que Culiacán comenzó a vivir una jornada de terror, en diferentes puntos de la ciudad aún había evidencia humeante de los hechos.
Noroeste realizó un recorrido por diferentes puntos en los que permanecían vialidades bloqueadas, restos de vehículos, sangre y casquillos tirados.
Ayer, el gabinete de seguridad pública nacional encabezó una conferencia de prensa con el Gobernador Quirino Ordaz Coppel en el Salón Gobernadores para dar detalles sobre la situación que atravesó Culiacán.
Un operativo fallido por detener a uno de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, Ovidio Guzmán López, sirvió para mantenerlo en su casa para ejecutar una orden de aprehensión para extradición a los Estados Unidos, pero la reacción de grupos armados no permitió a los elementos soportar la espera de una orden de cateo.
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Mientras los elementos del Ejército aguardaban por la orden, reportes en diferentes puntos de la ciudad avisaron sobre personas civiles armadas, amedrentando a la ciudadanía.
Los civiles robaron camiones pesados y otros vehículos para quemarlos y bloquear diferentes vialidades.
Muy cerca del Congreso del Estado aún humeaba un camión de volteo que fue robado en Las Quintas. También un tráiler y un camión de reparto en el crucero de Enrique Cabrera y Enrique Félix Castro.
Frente al estadio de Dorados de Sinaloa también permanecían los restos carbonizados de una patrulla de Tránsito, otro camión urbano y un camión revolvedora de concreto.
A unos 100 metros de la Fiscalía General del Estado, ayer fue retirada una media docena de vehículos con impactos de bala.
En el suelo todavía hay restos de sangre y casquillos de balas.
La autoridad informó ayer que contabilizaron nueve vehículos destruidos y quemados en diferentes puntos de la ciudad.
LOS HECHOS
Un operativo fallido por detener a uno de los hijos de Joaquín Guzmán Loera, Ovidio Guzmán López, sirvió para mantenerlo en su casa para ejecutar una orden de aprehensión para extradición a los Estados Unidos, pero la reacción de grupos armados no permitió a los elementos soportar la espera de una orden de cateo.
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