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Arte

Espero ser el diseñador más joven en vestir a la Virgen del Rosario: Édgar Mohe

“La Hija del Sol”, nombre que le dio al vestido de la Virgen, en su pecho trae un sol que simboliza el centro del universo, una la luz interna dentro del ser humano, en el creyente, de la fe, aseguró el diseñador mazatleco

ROSARIO._ Al asegurar a sus 25 años es considerado el diseñador más joven en vestir a las reinas del Carnaval Internacional de Mazatlán, Édgar Mohe, sostuvo que espera serlo también en crear un vestido para la Virgen de Nuestra Señora del Rosario.

Esto ante la fama que tiene la venerada imagen patrona de este Pueblo Mágico, al cambiar cada año hasta en tres ocasiones su vestido y que estas prendas sean altamente elaboradas como únicas.

En su experiencia, refirió que creó el vestido de la reina del Carnaval del año 2023, y en la más reciente edición del 2024 a toda la corte real femenina.

“Tuve la fortuna de ser el más joven en diseñar todo el cortejo real femenino del Carnaval de Mazatlán y pues ahora tengo, espero la fortuna de ser uno de los más jóvenes hacer el vestido de la virgen”, expuso.

“El vestido es una muestra de la fe y el amor que un ser humano puede tener hacia lo divino, entonces para mí simboliza algo muy, muy especial”.

El estilo, indicó que es barroco, corte princesa, con una falda semi circular, con banderillas que simbolizan los rayos del sol, color es una mezcla entre los tonos amarillo mango y amarillo canario, en un brocado; el manto fue hecho en una panilla color bugambilia.

“Quería yo representar la luz, el nombre del vestido es “La Hija del Sol”; en su pecho trae un sol que simboliza el centro del mundo, del universo, de todo, pero también es la luz interna dentro del ser humano, en el creyente, en la fe. Darle este simbolismo que es la luz que alumbra todo”, afirmó.

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La elección de los colores fueron para que contrastara con el brillo del retablo bañado en hoja de oro, y como dato particular que se inspiró en todos los estilos de bordados que existen en el museo de la virgen.

Con relación al tiempo de elaboración indicó que fue de alrededor de dos meses, con el apoyo de su madre Jazmín Hernández.

“Entonces era mezclar y darle un simbolismo más fuerte a este vestido y que no fuera un vestido más, que son hermosos todos los vestidos, tuve la oportunidad de tocarlos y todos son hermosos y yo quería que este fuera uno más en esa lista hermosa de vestidos”, aseguró.

Concluyó agradeciendo a la familia donante por la confianza, al pueblo de Rosario al formar parte de la tradición de vestir a la virgen, pero especialmente dedico este logro a su mamá.

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