Robespierre Lizárraga nombra a su quinto abogado en 6 meses

CULIACÁN._ Víctor Guadalupe Sepúlveda Álvarez es el nuevo defensor particular de Robespierre Lizárraga Otero, encargado del Despacho de Rectoría de la Universidad Autónoma de Sinaloa, dentro de la causa penal 836/2023 por presunto abuso de autoridad.

Pese a que estaba previsto fijar la nueva fecha para audiencia de revisión de medidas cautelares, el Juez aún no la dio porque primero debe revisar la disponibilidad de agenda.

Víctor Sepúlveda pidió tres meses para analizar el expediente. Fiscales y asesor jurídico público argumentaron que la Ley solo permite 10 días de plazo cuando nombran a un nuevo defensor.

Este nombramiento se da luego de que Lizárraga Otero revocó a Lorenzo Flores el 13 de febrero, ya que este no pudo estudiar todo el expediente para estar en condiciones de celebrar la audiencia para revisión de medidas cautelares.

Ese día, el Juez de Control llamó a abogados de la defensoría pública para que representaran a Robespierre, pero los litigantes no estaban preparados debido a que tuvieron que devolver la carpeta de investigación.

A la audiencia de este viernes esperaron a Francisco Martínez, defensor público que acudió el 13 de febrero, pero al llegar a la sede judicial notificaron que este renunció al Instituto de la Defensoría Pública por asuntos familiares.

Con este nuevo defensor, Robespierre Lizárraga suma ya cinco abogados desde que fue acusado por la Fiscalía General del Estado por abuso de autoridad. Todos los cambios de defensores se han dado después de que la Fiscalía solicitó la revisión de las medidas cautelares contra Robespierre, entre las cuales están la separación temporal del cargo.

El 21 de septiembre, cuando le vincularon a proceso, estaba representado por Alfonso Carlos Ontiveros Salas y Alfonso Carlos Ontiveros Elguezabal.

Posteriormente designó a Guadalupe Avendaño Ruiz, quien acudió a una audiencia de este caso el 30 de noviembre, pero por un supuesto accidente automovilístico le impidió estar el 4 y 6 de diciembre.

Miguel Luna Sosa fue nombrado el 11 de diciembre. Faltó a la audiencia de revisión de medidas cautelares del 9 de enero por una presunta faringitis; también inasistió el 1 de febrero, de forma injustificada, por lo que le revocaron.

El último abogado particular que tuvo el universitario fue Lorenzo Flores, a quien nombró el 6 de febrero pero despidió el 13 del mismo mes.