Muestra violencia familiar su peor cara en 2020; pandemia la agravó: CESP

José Abraham Sanz
23 septiembre 2020

"Junio de 2020 marcó la cifra mensual más alta de la que se tenga registro desde el año 2010, por violencia familiar, 466 casos, lo que evidenciaría el incremento de la problemática durante la cuarentena, dijo Ricardo Jenny del Rincón, coordinador general del CESP"

El delito de violencia familiar es el que más incrementó en la comparación que realizó Ciudadanos Evaluando, una herramienta de la Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública, del primer semestre de 2019 contra el de 2020.

A comparación del homicidio doloso fue el que más bajó, con 4 por ciento, la violencia familiar subió un 9 por ciento, por lo que el CESP sugirió que se solicite ayuda al gobierno federal.

“Junio de 2020 registró la cifra mensual más alta de la que se tenga registro desde el año 2010, por violencia familiar, 466, lo que evidenciaría el incremento de la problemática durante la cuarentena”, dijo Ricardo Jenny del Rincón, coordinador general del CESP en una conferencia.

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“Durante el primer semestre este delito mantuvo la tendencia al alza, con incremento de 9 por ciento contra el mismo periodo del año pasado; la pandemia realmente llevó de un nivel muy alto que teníamos en violencia familiar a unas cifras que definitivamente rebasan toda acción que la autoridad esté emprendiendo aquí en nuestro estado... la autoridad en Sinaloa por sí misma no puede con este tema, requiere realmente del apoyo de la autoridad federal para combatir la violencia familiar”.

La violencia familiar aparece en uno de los cuatro puntos de conclusión del análisis de las cifras de incidencia delictiva de este primer semestre de 2020 y lo peor es que, junto a la violencia contra la mujer y la infancia, sigue creciendo.

“Es urgente que las autoridades responsables de prevenir y atender estos delitos rindan cuentas claras e implementen políticas públicas efectivas, eficaces y medibles”, insiste el CESP en el documento mostrado, tal y como lo hizo hace unas semanas en su posicionamiento luego del asesinato de dos jóvenes de 16 y 14 años, cuyos cuerpos fueron carbonizados.

La cifra positiva que arrojó el análisis de la incidencia en Sinaloa fue el homicidio doloso, puesto que 94 fue la cifra más alta en los últimos años.

“Sinaloa menos 4 por ciento en primer semestre con respecto al mismo periodo de 2019, mientras que a nivel nacional la disminución fue de .58 por ciento”, dice el reporte.

Lo peor, según el CESP, es que 7 de cada 10 homicidios en Sinaloa se cometen con arma de fuego, una tendencia que se mantiene desde 2019.

“Lo que refleja que no se combate de fondo el uso de armas en la entidad”, recalca.

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