"Acerca del Yoreme-Mayo"

"El tiempo trae consigo cambios entre ellos la modernidad, pero el paso de este aún no ha logrado borrar lo que en tiempos remotos se sembró"
07/11/2015 12:35

    GUASAVE._Uno de los grupos indígenas que se ha esforzado por mantener vigentes las tradiciones y costumbres de su cultura es el de los Yoremes-Mayos, que sientan sus raíces el noroeste del país, específicamente en los municipios de Álamos, Navojoa, Etchojoa y Huatabampo en el estado de Sonora, y en Sinaloa abarca Los Mochis, El Fuerte, Choix, Guasave y otras regiones a las que se ha extendido.
     
    La palabra mayo, según la tradición oral, significa "la gente de la rivera", por lo tanto la comunidad se divide en dos partes, a las cuales denominan: los Yoremes, "el que respeta la tradición" y los Yoris, el hombre blanco o "el que no la respeta".
     
    Vestimenta
    Actualmente la vestimenta que antaño era característica, solo se utiliza para las festividades que realizan, como son las danzas del Pascola y el Venado, para lo cual portan pantalón de manta, cinturón de cuero con cascabeles de varios tamaños, al que se le conoce como 'Coyolim'; una banda larga compuesta por capullos de mariposa rellenos de piedritas, el cual denominan 'Tenaboim' o mejor conocido en español como 'Tenábaris', máscaras de madera tallada o cabeza de venado según sea el caso.
     
    Lo que se representa en las danzas es la historia de los animales del monte, la manera en que el hombre los sacrifica, la relación libre del hombre con la naturaleza, además de ser un recurso que posibilita la comunicación ritual con el 'Huya aniya', el mundo de lo sobrenatural y lo mágico.
     
    Lengua
    Este grupo encuentra la raíz de su lengua en la familia taracahita del tronco Yuto Nahua, con semejanzas dialectales notables con la lengua Yaqui y la lengua Guarijío.
     
    Música
    Las melodías que se emplean para los pascolas, es característica de este grupo, la cual no es más que el dualismo entre las influencias eurocristianas e indoamericanas, no solo en la instrumentación, sino en el ritmo de los sones. El arpa, que aporta bajos y base rítmica, y el violín, con la melodía a su cargo, acompañan al pascola con tonadas alegres cuando éste es el único actor en escena; la flauta de carrizo (melodía) y el tambor de doble parche (ritmo) lo hacen cuando los danzantes representan a las comparsas o adversarios del Venado, o cuando interpretan el papel de animales.