"Arbitro noruego reconoce error en el duelo Bayern-Fiorentina"
MADRID (NTX)._ El árbitro noruego Henin Ovrebo, quien dirigió el miércoles el duelo de "ida", de los Octavos de Final de la Liga de Campeones de Europa entre el Bayern Múnich y Fiorentina, reconoció ayer su error que a la postre le dio el triunfo al cuadro alemán.
Al minuto 89, el delantero croata Ivica Olic habilitó a su compañero Miroslav Klose, quien en evidente fuera de lugar remató de cabeza el balón al fondo de las redes, para el 2-1 final a favor del equipo alemán.
El anterior error lo admitió el silbante noruego, quien señaló que se percató de la falla hasta después del encuentro, con la ayuda de la repetición.
"Si uno se basa en las imágenes y la información que hemos recibido después del partido, parece que efectivamente se trató de una situación de fuera de juego. Deberíamos haberlo visto y pitado. Lamentablemente no fue así", indicó.
Sin querer ser el máximo responsable, Henin Ovrebo, agregó que en todo momento de la jugada se apoyó en su asistente y ante la confianza del abanderado, no dudó en dar por válido el gol, con el que a la postre ganó en casa el Bayern Múnich.
"Me basé en el asesoramiento que recibí de mi asistente, así que decidí dar el gol, por lo que es mi responsabilidad. Siempre que tengo dudas hago caso del consejo del árbitro asistente, que es la que me hace tomar la decisión final", dijo.
REACCIONES EN ITALIA
Expresan indignación
ROMA (NTX)._ - El presidente de la Federación Italiana de Futbol, Giancarlo Abete, expresó ayer su indignación por lo que fue calificado como "un robo" contra la Fiorentina, que fue perjudicada con un gol en fuera de juego, durante un partido de la "Champions League".
"Existe la conciencia trasversal de que hubo un manejo del partido, del árbitro y de los asistentes, que no estuvo a la altura, porque no hablamos de centímetros, no hablamos de contacto, hablamos de metros (de posición adelantada)", apuntó.
El dirigente calificó como una "injusticia evidente", el gol dado por bueno, por el árbitro noruego Tom Henning Ovrebo.