"Cabalgata agonizante"

"Colapsan 8 caballos y uno más muere por el fuerte calor, en la Primera Cabalgata de Gobierno"
09/11/2015 12:38

    CULIACÁN._ "No vuelvo a participar en cabalgatas", expresa Édgar Lugo, al pasar su mano derecha sobre su caballo color gris, que agoniza en el suelo.
    Son los estragos de la Primera Cabalgata organizada por el Gobierno del Estado, encabezada por Mario López Valdez.
    "Moro" se disputa entre la vida y la muerte, después de recorrer alrededor de 17 kilómetros bajo el sol intenso.
    Sufre deshidratación. El veterinario conecta suero con una manguera inyectada en su cuerpo. Es la botella número 20 en sólo dos horas. El animal inhala una bocanada de aire con sus escasas fuerzas. Su estómago se infla, parece reventar. Se aferra a la vida a sus 15 años.
    Es el sufrimiento vivo y real del agotamiento, de los estragos de una insolación generada por un peregrinar que inicia en el estadio de futbol Banorte y concluye en la calzada Las Torres. El caballo yace acostado a sólo dos kilómetros de arribar a su objetivo: la Unión Ganadera Regional de Sinaloa. A unos cuántos pasos de que su jinete deseó llegar horas antes.
    Y al parecer no llegará porque su cabeza, estómago y piernas fornidas ahora están cubiertas de sangre que brota por sus heridas. "Moro" siempre ha sido un caballo sano, pero ahora declina dar un paso más, se rehúsa a continuar ese camino de pavimento enardecido por los rayos solares, intensos, de 36 grados centígrados.
    Por primera vez desobedece a su jinete, quien desea verlo en pie. El animal está recostado contra su voluntad en aquella banqueta atestada de vecinos curiosos. "Moro" tiene la mirada perdida, sus ojos ensangrentados. Al igual que su hocico. Sufre, a pesar del agua que le echan en un intento por refrescar su cuerpo. Agoniza en aquella tierra convertida ya en fango.
    Martín sigue frotando sus manos sobre el tercio y grisiento pelo. Sólo levanta la voz para darle ánimos a ese noble animal que compró hace dos años. Se culpa por obligarlo a realizar un recorrido que atraviesa las calles de Culiacán en aproximadamente 2 horas con 40 minutos, cuando en años anteriores se prolonga por más de tres horas y media.
    "Esto ya lo habíamos platicado en la asociación y ya se había acordado, tanto por el calor que afecta a los animales. No nada más yo, toda la gente lo decía, que era muy peligroso el calor para los animales. Pero fue cuestión de que se admitió, se aseguró (la seguridad), pero lo que sí para la otra no vuelvo a participar en cabalgatas en tiempos de mucho calor", reitera.
    "No se iba hacer la cabalgata por el calor, pero por celebrar el Mes Patrio, acordamos de que sí hay que hacerla", dice.
    Édgar se recrimina más el hecho de no dejar al caballo descansar los tres recesos acordados con los participantes de la "Cabalgata por la Unión", propuesta un mes antes por el Gobernador Mario López Valdez a la Unión Ganadera Regional de Sinaloa, para conmemorar el Mes Patrio.
    Ésta es la primera ocasión en que se realiza un desfile con la participación de más de 2 mil caballos para festejar el aniversario de la Independencia de México en Culiacán. Es la primera vez en que un Ejecutivo estatal lidera a los jinetes.
    "Se acordaron muchas cosas, la verdad, de las cuales muchas no se cumplieron. Todo estuvo muy firme, todo estuvo completo. Es esto, esto y esto. Pero ahorita estamos viendo que no se dieron las cosas como dijeron", expone.

    ¿Viste que tenían prisa por llegar?
    "La verdad es que sí. Las veces pasadas, el 14 de noviembre del año pasado hicimos más tiempo, la verdad. Hicimos más tiempo porque venían los animales más despacio. Se me hace que sí veníamos un poquito acarreriaditos... hicimos menos de lo normal", precisa.
    "La verdad es que no les dimos los descansos adecuados a los animales. Los presionamos mucho", concluye Jesús Lugo.
    "Es la primera que hacemos nosotros, en septiembre, y la vemos difícil que para el próximo año la podamos realizar de esta manera".
    Más adelante, por la misma vereda yace el cuerpo de un caballo blanco. Es otra baja más por el efecto del calor. Está abandonado por sus dueños y por las autoridades.
    Y aproximadamente dos kilómetros más, adentro de las instalaciones de la UGRS, celebran los jinetes que sí lograron completar su meta. La mayoría se renueva con agua y refrescos. Otros ingieren bebidas alcohólicas. Sus camisas están adheridas al sudor expulsado por su cuerpo. Están cansados, pero alegres y satisfechos.
    Pero el festejo no es para todos. No. En los corrales otro veterinario desesperado expresa "ojalá se levante", al referirse al su caballo negro, que también se aferra a la vida, a pesar de la insolación que consumió sus fuerzas. En cantidades mínimas y constantes derrama su sangre pura en aquel camino, por donde entró unos minutos antes el Gobernador Mario López Valdez.
    Los jinetes a su alrededor auguran su deceso, aunque el médico, exasperado, intenta demostrar lo contrario.
    Del otro lado, en las caballerizas, hay otro más. El veterinario que lo atiende es el más tenso. Aplica el mismo método, el caballo parece responder, aunque también las esperanzas son escasas.
    El veterinario del Comité Estatal de Fomento y Protección Pecuaria de Sinaloa, Martín Aguilar, dice que son ocho los caballos con el mismo cuadro médico, más uno muerto.

    -¿Con estos resultados, no es negativo realizar una cabalgata en este mes?
    "No, la verdad es que es igual. Hay gente que no se quiso arriesgar y pues mejor no vino a la cabalgata. De antemano, lo repito, no es el mejor tiempo para una cabalgata de este tipo".

    ¿Qué recomienda usted?
    "Que sea más corta, y no este tipo de caballo, a veces los caballos con mucha pureza no están tan bien ejercitados y sucedo esto".

    ¿Para estas fechas (en septiembre), qué distancia recomienda?
    "Más o menos la mitad (alrededor de nueve kilómetros), tal vez".

    Mientras a un lado. El Gobernador deleita un platillo a base de camarones junto a sus secretarios de la Unidad de Transparencia y Rendición de Cuentas, Juan Yamuni Robles; general de Gobierno, Gerardo Vargas Landeros; el subsecretario de Ganadería, Francisco Castillo Hernz; y el presidente de la UGRS, Faustino Hernández.
    "El caballo fue el que sufrió al traer 100 kilos arriba durante tres horas, no resulta cómodo en el pavimento con estas temperaturas. Pero el calor humano y el calor de los animales, y además la química que se dio con la gente que estaba durante todo el recorrido, pues hizo que con las notas musicales fuera una extraordinaria experiencia para mí", expresa el Ejecutivo estatal, al bajar de su caballo.
    En la cabalgata lo acompañan Elisa Pérez Garmendia, directora de Comunicación Social del Gobierno estatal; Óscar Félix, subsecretario de Agricultura; el subdelegado de Sagarpa, Antonio Vázquez Medina; Jorge Esquerra Hernández, dirigente de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados en Culiacán, quien coloca los estribos a López Valdez, al subir y bajar del caballo.
    Ahí disfrutan la fiesta con música, con 8 mil platillos de barbacoa y tacos de carne, refrescos, bebidas alcohólicas, y más tarde, demostraciones de habilidades de los caballos.
    A pesar de que hay ganaderos que no podrán adquirir maquinaria para mitigar los efectos de la sequía que afecta cada temporada, la UGRS corrió con los pagos del festejo.
    La próxima cabalgata está prevista para noviembre.