"'Cortan' agua embotellada a la Comuna"

GUASAVE.- Tras haber faltado el Ayuntamiento al compromiso de saldar una deuda de 260 mil pesos, un proveedor de agua purificada decidió acudir al Palacio municipal para retirar todos los garrafones de agua y enfriadores que le había prestado al Municipio.
Roberto Heredia Sánchez, propietario del negocio afectado, indicó que después del 30 de septiembre, cuando hizo público el adeudo que arrastraba el Ayuntamiento con él, solamente le abonaron 60 mil pesos a una cuenta que en ese entonces era de 320 mil pesos.
Además desmintió al Tesorero Adán Ahumada Garibaldi, quien manifestó en esa ocasión que habían llegado a un acuerdo con él para saldar la deuda.
"Fueron mentiras lo que les dijo el Tesorero de que habían pactado conmigo, porque me dieron 60 mil pesos y todavía no han podido pagarme; todavía me adeudan 260 mil pesos", reiteró.
Ante eso, ayer acudió al Palacio municipal para retirar 15 garrafones que les había prestado e igual número de enfriadores que estaban distribuidos en diferentes oficinas.
Heredia Sánchez aseveró que aún quedaba más garrafones y enfriadores en el Taller municipal, en el Cecjude y algunas otra dependencias, los cuales también retiraría.
Y es que a parte de que no le pagaban, las autoridades municipales tampoco daban muestras de querer recibirlo para obtener una explicación, dijo.
"Ayer pasé tres horas para que me recibieran y al final me dijo la secretaria que tenía mucho negocio y me fui porque andaba sin comer y no he recibido ninguna comunicación", abundó.
"Y anteriormente había venido dos veces por semana, pero me decían que no sabían cuándo resolverme porque no había dinero".
El pequeño empresario aseveró que llevará su demanda hasta las últimas consecuencias, porque no quiere que la deuda se la endosen a la siguiente administración, pues el pago demoraría por lo menos seis meses más. 

Pierde el
crédito con
proveedores
A consecuencia de la falta de liquidez de pequeña planta de agua purificada, Roberto Heredia Sánchez perdió el crédito que le otorgaban sus proveedores desde hace 15 años.
"Ya no tengo créditos de envases, de tapaderas, de etiquetas y hasta las que me hacían en Guadalajara ya me las enviaron", lamentó. "Lo que va a pasar es que voy a cerrar el negocio".