"Cumple un año la invasión de Villa Tutuli"
MAZATLÁN._ Aunque saben que desde hace 12 meses ocupan de forma ilegal las viviendas inconclusas y lotes de la segunda sección del Fraccionamiento Villa Tutuli, precaristas no pierden la esperanza de tener un día su propiedad.
Esperan correr con la suerte de los invasores de la Salvador Allende, pero hasta el momento ninguna autoridad se ha acercado para proponerles una reubicación o una venta de terrenos, lamentó el líder de los precaristas, Víctor Galván Cebreros.
Lo que sí llegó a su zona fue una Jornada Médica organizada por las instituciones Banco de Alimentos, Pro México y la Escuela de Artes y Oficios C.J. Felton.
Durante dos horas, un grupo altruista ofreció diversos servicios a las más de 150 familias que habitan esa invasión, que se ubica en la periferia norte de la ciudad.
Por sólo dos pesos tuvieron consultas médicas con dotación de medicamentos, además de bazar de ropa y de blancos, así como la venta extraordinaria de despensas para las familias a precios accesibles.
Galván Cebreros defendió a las 150 familias que están invadiendo Villa Tutuli; aseguró que la actual situación económica los ha orillado a instalar su hogar en un sitio inhóspito.
"Somos el resultado de la falta de capacidad del Gobierno para atender la demanda de vivienda, de la difícil situación económica y el desempleo que padece la sociedad", aseguró.
'Necesito una casa'
El marido desempleado, ellas sin trabajo, con varios hijos qué mantener y sin dinero para continuar pagando la renta, Rosario y Rosa son dos amas de casa que se fueron a la invasión de Villa Tutuli en busca de un hogar para los suyos.
"Donde vivíamos nos sacaron porque ya no podíamos pagar la renta, así que con pena y todo aquí estamos, invadiendo la Villa Tutuli, necesito una casa para mi familia", comentó Rosario.
Eso pasó hace varios meses; desde entonces han buscado trabajo, pero no han tenido éxito. Sin embargo, ha encontrado apoyo con los vecinos de la invasión, lo que le da la esperanza de que a pesar de todo sí se puede salir adelante, todo es cosa de perseverar.
Al igual que ella, Rosa vivía en el Fraccionamiento Santa Fe, en una casa rentada, pero a raíz de un recorte de personal en la empresa donde trabajaba su marido tuvo que buscar otro lugar dónde vivir, ya no había para seguir pagando.
"Soy originaria del sur, venimos buscando una vida mejor y encontramos que en Mazatlán se vive a gusto, lo malo es que ahora ya no tenemos trabajo, ni casa, por eso nos venimos a la invasión, cuando mi marido tiene una chambita lo que gana no lo comemos, antes teníamos que pagar la casa", señaló.
150
familias
viven en
la invasión
Villa Tutuli