"Defensor del Lector"
El martes 10 de marzo inició en Mazatlán el XVI Congreso de Valores, organizado por Editorial Noroeste y la Universidad TecMilenio Campus Mazatlán, denominado Fortalezas para la vida, con el objetivo de fomentar y reforzar los valores en la familia e intercambiar experiencias de éxito.
Sin embargo, en la portada del ejemplar de ese día, en la edición de Mazatlán, se cometió un grave error de fecha al resaltar los datos del programa en la nota correspondiente: Para Saber. Lugar: Centro de Convenciones. Fecha: Hoy martes 11 y mañana miércoles 12.
Denominación antigua
En la misma portada de la edición porteña del martes 10 se resaltó una información útil y oportuna, en la que se especificaron las fechas de inicio de vacaciones y de regreso a clases, así como los días y eventos principales de la Semana Santa, Semana de Pascua y Semana de la Moto.
Empero, al especificar el triduo sacro o triduo pascual (jueves, viernes y sábado santos) se nombró el último día con la denominación antigua: Sábado de Gloria, en lugar de Sábado Santo.
El Papa Pío XII, en 1951, inició una reforma litúrgica que se consolidó en la reforma litúrgica general del Concilio Vaticano II. Se llamaba Sábado de Gloria porque se celebraba la Resurrección de Jesús el sábado por la mañana, debido a que existía una norma severa de ayuno sacramental preparatorio. Hoy se puede comulgar con ayuno de una hora, pero anteriormente se guardaban varias horas. Además, si el Viernes Santo ya había sido día de ayuno, era exagerado prolongarlo durante casi todo el sábado.
El 9 de febrero de 1951, mediante el decreto Dominicae Resurrectionis (Acta Apostolicae Sedis 43), el Papa Pío XII permitió que la Vigilia Pascual se celebrara de noche. El 16 de noviembre de 1955 publicó otro decreto llamado Maxima Redemptionis (Acta Apostolicae Sedis 47), en el que ordenó que fuese obligatorio a partir de 1956. Algo provechoso fue el acceder a prolongar el ayuno sacramental preparatorio a la comunión a solamente tres horas.
A partir de entonces, la celebración de la Vigilia Pascual se celebra por la noche del sábado, al cual se le llama Sábado Santo, ya que es incongruente calificar de glorioso el día en que Jesús yace en el sepulcro. Es un día de meditación y espera junto a la tumba de Jesús, aguardando la gran celebración de su Resurrección.
El Papa Juan XXIII convocó a la realización del Concilio Vaticano II, el cual se llevó a cabo del 11 de octubre de 1962 al 8 de diciembre de 1965. Fallecido el 3 de junio de 1963, lo sucedió el Papa Pablo VI, quien concluyó la primera etapa conciliar y dirigió las tres restantes.
En la Constitución Dogmática sobre la Sagrada Liturgia Sacrosantum Concilium, que fue el primer documento promulgado en el Concilio, de fecha 4 de diciembre de 1963, ya se nombra como Sábado Santo.
Error de dedo
En el foco gráfico de la portada del lunes 9 de marzo, en la edición de Mazatlán, se publicó un pase o llamado a la nota de la bendición de la colecta de la Cruz Roja. Sin embargo, se cometió un error de dedo al escribir la contracción de la preposición a y el artículo determinado el, al, en lugar del artículo determinado la: Con la meta de reunir 3 millones de pesos, el Obispo Mario Espinosa Contreras llamó a participar en al colecta anual de la Cruz Roja....
Pie de foto equivocado
En la página 7 de la sección A del mismo lunes 9 de marzo, en la edición de Mazatlán, se publicó como nota principal el atentado a balazos que sufrió la Alcaldesa de Matamoros, Norma Leticia Salazar Vázquez. No obstante, en el pie de foto se publicó el nombre de otra persona: Adalberto López Saenz.
En la edición de Culiacán sí se publicó de manera correcta el nombre de la Alcaldesa en el pie de foto.
Error en acentuación
En la portada de la sección Local del mismo lunes 9 de marzo, en la edición de Mazatlán, se publicó el último adiós que se dio a una joven de 19 años, estudiante de Derecho y militante priista, que falleció atropellada.
Se destacaron las palabras que pronunció el dirigente priista, Ricardo Ramírez, pero con un error de acentuación: A los padres les damos las más sentidas condolencias por ésta pérdida....
Tradicionalmente se enseñó que la palabra esta llevaba tilde cuando hacía las veces de pronombre demostrativo: éste es mi perro. En cambio, no llevaba tilde cuando hacía las veces de adjetivo demostrativo: este libro es muy bueno, como es el caso que nos ocupa.
No obstante, la Real Academia de la Lengua Española, en 2010, fue más lejos al recomendar la eliminación de la tilde en los pronombres demostrativos.
El adverbio solo y los pronombres demostrativos, sin tilde.
La palabra solo, tanto cuando es adverbio y equivale a solamente (Solo llevaba un par de monedas en el bolsillo) como cuando es adjetivo (No me gusta estar solo), así como los demostrativos este, ese y aquel, con sus femeninos y plurales, funcionen como pronombres (Este es tonto; Quiero aquella) o como determinantes (aquellos tipos, la chica esa), no deben llevar tilde según las reglas generales de acentuación, bien por tratarse de palabras bisílabas llanas terminadas en vocal o en -s, bien, en el caso de aquel, por ser aguda y acabar en consonante distinta de n o s.
Aun así, las reglas ortográficas anteriores prescribían el uso de tilde diacrítica en el adverbio solo y los pronombres demostrativos para distinguirlos, respectivamente, del adjetivo solo y de los determinantes demostrativos, cuando en un mismo enunciado eran posibles ambas interpretaciones y podían producirse casos de ambigüedad, como en los ejemplos siguientes: Trabaja sólo los domingos [= trabaja solamente los domingos], para evitar su confusión con Trabaja solo los domingos [= trabaja sin compañía los domingos]; o ¿Por qué compraron aquéllos libros usados? (aquéllos es el sujeto de la oración), frente a ¿Por qué compraron aquellos libros usados? (el sujeto de esta oración no está expreso, y aquellos acompaña al sustantivo libros).
Sin embargo, ese empleo tradicional de la tilde en el adverbio solo y los pronombres demostrativos no cumple el requisito fundamental que justifica el uso de la tilde diacrítica, que es el de oponer palabras tónicas o acentuadas a palabras átonas o inacentuadas formalmente idénticas, ya que tanto solo como los demostrativos son siempre palabras tónicas en cualquiera de sus funciones. Por eso, a partir de ahora se podrá prescindir de la tilde en estas formas incluso en casos de ambigüedad. La recomendación general es, pues, la de no tildar nunca estas palabras.
Las posibles ambigüedades pueden resolverse casi siempre por el propio contexto comunicativo (lingüístico o extralingüístico), en función del cual solo suele ser admisible una de las dos opciones interpretativas. Los casos reales en los que se produce una ambigüedad que el contexto comunicativo no es capaz de despejar son raros y rebuscados, y siempre pueden evitarse por otros medios, como el empleo de sinónimos (solamente o únicamente, en el caso del adverbio solo), una puntuación adecuada, la inclusión de algún elemento que impida el doble sentido o un cambio en el orden de palabras que fuerce una única interpretación.
http://www.rae.es/consultas/el-adverbio-solo-y-los-pronombres-demostrativos-sin-tilde
Empero, en enero de 2013, Salvador Gutiérrez, miembro de la RAE, reconoció que muchas personas se opusieron a los consejos, que no regla, de la última edición de Ortografía y continúan acentuando.
http://www.20minutos.es/noticia/1696378/0/rae-ortografia/tilde-solo-este/lengua-cambios/##xtor=AD-15&xts=467263
Espero sus comentarios, quejas, dudas y sugerencias.
defensordellector@noroeste.com
rfonseca@noroeste.com