"Eran alegres"

"Conozca quiénes eran las cuatro personas muertas a manos de soldados del Ejército en Badiraguato"
06/11/2015 07:35

    Guadalupe Martínez

    Las cuatro personas que murieron a manos de militares la noche del 26 de marzo en el poblado de Santiago de Los Caballeros, Badiraguato, se distinguían por ser alegres y por ayudar a sus semejantes; se dedicaban a la ganadería y al comercio, cuentan sus familiares.
    Uno de los fallecidos, Irineo Medina Díaz, nació con retraso mental, discapacidad que le impidió tener una vida normal, pero aún así durante la Operación Cóndor los militares le sembraron un frasco de semillas de mariguana y lo encarcelaron. Sus familiares afirman que a pesar de su estado mental nunca le hizo un mal a nadie.


    Sus semblanzas

    Zenón Medina López
    Edad: 30 años
    Estado civil: Casado
    Oficio: Ganadero
    Escolaridad: Primaria
    Originario de: La Juanilla, Badiraguato
    Residente de: Colonia Las Quintas, Culiacán

    Zenón era una persona muy querida por sus vecinos y familiares, ya que era un joven que le encantaba ayudar a las personas, desde niño fue servicial con los demás habitantes de su pueblo. A los 21 años se casó con Reinalda Morales Rodríguez, con quien procreó tres hijos, Jonathan, de 11 años, Jesús, de 7 y Yahir de 4.
    El joven radicaba en Culiacán, pero la mayor parte la pasaba en La Juanilla, donde cuidaba el ganado de su propiedad y de su padre. Nunca tuvo problemas con las autoridades locales y militares, señalan algunos de sus familiares.
    Un día entes de los hechos se encontraba en la capital, pero el miércoles acudió al poblado porque lo habían invitado a la comida en el Potrero de Los Medina. Nunca pensó que jamás volvería con su familia. También subió a la camioneta Hummer y se dirigía a los 15 años en el poblado de Guanajuato cuando fue acribillado por soldados.


    Irineo Medina Díaz
    Edad: 55 años
    Estado civil: Soltero
    Oficio: Ninguno
    Escolaridad: Ninguna
    Originario y residente: La Juanilla, Badiraguato
    "Nayito", como lo conocían en su pueblo, nació con retraso mental, pero a la edad de 17 años fue detenido por el Ejército durante la Operación Cóndor, quienes lo golpearon y le sembraron un frasco con semillas de mariguana. A pasar de su estado mental estuvo preso varios años en Las Islas Marías, después salió libre y regresó con su madre y sus hermanos.
    Debido a su incapacidad no sabía leer ni escribir, pero ayudaba en los mandados a los habitantes de su comunidad, quienes le regalaban dinero y con ello ayudaba a su madre. El día de los hechos le dijo a su progenitora que iba a comer carne con los muchachos y ya no volvió.


    Édgar Geovany Araujo Alarcón
    Edad: 28 años
    Oficio: Comerciante
    Escolaridad: Secundaria
    Estado civil: Soltero
    Originario y Residente de: Badiraguato
    Édgar Geovany perdió a su padre de los 8 años y fue educado por su madre y un tío. Desde chico aprendió a trabajar en las labores del campo y estudió hasta el nivel secundaria. Al dejar sus estudios trabajó con su madre en una ferretería de su propiedad.
    Hace cinco años cerraron la ferretería y abrieron una peletería, la cual era atendida al 100 por ciento por Édgar Geovany. Además pertenecía a un club de jóvenes de Badiraguato que en fechas especiales como diciembre, recolectaban ropa y juguetes que repartían entre la gente más necesitada en la zona serrana del municipio.
    El día de la tragedia, comentan sus allegados, como muchos otros, el joven acudió a la comida en El Potrero de Los Medina porque fue invitado, pero nunca pensó que los militares lo atacarían. Durante toda su vida jamás tuvo problemas con la ley.

    Manuel Medina Araujo
    Edad: 29 años
    Oficio: Ganadero
    Estado civil: Casado
    Escolaridad: Primero de Secundaria
    Originario de: La Juanilla
    Residente de: Colonia 6 de Enero, en Culiacán
    Manuel radicaba en Culiacán, pero la mayor parte tenía que acudir al poblado de La Juanilla, donde tenía algunas vacas, con las cuales mantenía a su esposa Eloina Pérez Pérez y sus hijos Joseph Manuel, de 9 años y Yatziri, de 5 años.
    La familia no tenía casa propia, por ello vivían en el domicilio de la suegra de Manuel. Ambos volvían al poblado durante la semana y sus hijos se quedaban en la capital para asistir a la escuela.
    Manuel nunca tuvo problemas con las autoridades y menos con los militares, creció en la sierra, era alegre y muy entregado a su familia. El día de los hechos acudió a la comida en el Potrero de Los Medina. Convivió toda la tarde y se dirigía junto con sus amigos a la fiesta de 15 años en el poblado de Guanajuato, pero no llegó.