"Estaciónate sin estrés"
Estacionar el auto es una maniobra diaria que puede estresar y elevar la presión sanguínea, tanto de conductores novatos como de experimentados. Los expertos en conducción dicen que el estacionado perfecto es en dos movimientos, sin embargo, la mayoría de los conductores tiene que hacer muchos más, casi tantos como las preguntas que pueden surgir al buscar y encontrar dónde acomodar el carro:.
¿Encontraré estacionamiento?, ¿cabrá mi carro?, ¿hice los movimientos correctos?, ¿estoy bien alineado?, ¿estoy lejos de la banqueta?, ¿quedé salido?, ¿estoy muy cerca al frente o atrás?, ¿obstruyo el paso?, ¿tendré que volver a moverme?, ¿me están viendo?
Una encuesta reciente realizada por Ford en Europa reveló que estacionar el automóvil resulta una actividad estresante para la mayoría de los conductores, no sólo para los aprendices. Uno de cada tres europeos reconoce que no puede estacionar su vehículo en el primer intento, de ese 33 por ciento, el 41 por ciento son mujeres, indican los resultados arrojados por el estudio realizado a los conductores del Viejo Continente.
En México, específicamente en Mazatlán, la situación no es muy diferente y, aunque no existe una investigación formal al respecto, la incidencia de este fenómeno podría ser más alta, considera Roberto Jaime Rodríguez, Coordinador de Educación Vial de la Dirección de Vialidad y Transportes.
"Batallar o no para estacionarse depende mucho del tiempo que la persona tiene conduciendo y qué tanto conozca su vehículo, porque en materia de conducción todo depende de la práctica", explica el educador vial.
La pericia para conducir, señala, tiene qué ver con el tiempo que la persona tiene haciéndolo, su adaptación al tipo de vehículo que está utilizando y el uso de los espejos retrovisores, así, con sólo ver un espacio, fácilmente sabe si cabe o no.
"Puedes tener más de 30 años manejando cierto tipo de vehículo, pero si de pronto cambia a otro diferente, al inicio se dificultará un poco. Las habilidades se desarrollan con la práctica, pero también influye el carácter de la persona", añade.
La situación de estrés y dificultad puede empeorar si hay una fila de autos detrás, con conductores tocando el claxon o peatones observando entretenidos la manera en que se realiza la maniobra.
Para combatir la fobia a estacionarse algunos fabricantes de automóviles, como Ford, han desarrollado sistemas de estacionamiento automático, que con sólo apretar un botón evitan el estrés y nerviosismo del conductor.
Se llama Asistencia Activa de Estacionamiento, o Active Park Assist, conseguida gracias a la Asistencia Electrónica de Poder a la Dirección (EPAS), que es estándar en todos los vehículos Ford equipados con el motor V6 Eco Boos de 3.5 litros.
La Asistencia Activa de Estacionamiento trabaja al toque de un simple botón, en la consola central; es una guía para el conductor, le indica cuándo parar, cambiar a reversa, y dejar que el sistema trabaje.
Cuando el sistema se activa, inicia el rastreo de un espacio adecuado; al encontrar el lugar, suena una alarma audible y notifica en la pantalla de mensajes. Los movimientos de la dirección los realiza el sistema, el conductor sólo necesita frenar.
Otros fabricantes han desarrollado aditamentos como espejos direccionales movibles y con luz, y el sensor de distancia con sonido, todo para disminuir la tensión al conductor y alertar sobre la maniobra a conductores y peatones de alrededor.
Al respecto, Jaime Rodríguez reconoce que la tecnología facilita en mucho la vida de las personas, sin embargo no es recomendable que los conductores novatos la utilicen, para evitar desarrollar la dependencia.
"Es muy cómodo tener un sistema que nos ayude a hacer las cosas fácilmente, pero no olvidemos que no todos los vehículos tienen esa tecnología y que en un momento dado podemos vernos obligados a conducir otros carros, así que lo mejor es aprender a hacer las cosas bien desde el principio", sugiere.
Fuentes adicionales: autocosmos.com.mx, El Universal e infomanejo.com
EL ESTRÉS
Las situaciones de estrés no son el mejor acompañante que un conductor puede tener en su trayecto, pues tensan gran parte del organismo y, en un nivel mantenido, generan trastornos físicos y psicológicos.
Por eso es importante aprender a controlarlo en lugar de permitir que te domine. Si de plano conducir es una actividad demasiado estresante para ti, lo mejor es evitarla y utilizar el transporte público.
CÓMO ESTACIONARTE CORRECTAMENTE
Salvo que te encuentres en un lugar con cajones de estacionamiento, la opción más común para estacionar Tu Auto es en forma paralela o de cordón, es decir, un auto detrás del otro, con un lado del auto paralelo al borde, que es precisamente el "coco" de muchos conductores. Para ello toma en cuenta lo siguiente:
1. Acércate y calcula el espacio disponible
Enciende las intermitentes, circula a baja velocidad y en forma paralela a los vehículos estacionados, con una separación de 10 a 15 centímetros entre el espejo de Tu Auto y los vehículos estacionados.
Detente cuando la trompa de Tu Auto coincida con la llanta delantera de la unidad estacionada y evalúa si el espacio disponible es acorde a las dimensiones del vehículo que conduces.
2. Comienza el estacionamiento
Ya alineado, sin soltar el freno, girar el volante hasta el extremo o tope derecho; mete la reversa e inicia el ingreso en el espacio de estacionamiento.
Suelta el freno y retrocede lentamente para ingresar en el espacio disponible regulando la velocidad con el embrague, sin acelerar el motor.
Detente cuando el extremo delantero derecho Tu Auto coincida con la línea de la cola del otro vehículo. Frena y mantén oprimido el pedal, para evitar que se desplace.
Acciona la dirección para completar el ingreso girando el volante en sentido contrario hasta su extremo o tope izquierdo.
3. Completa el ingreso al espacio de estacionamiento
Detente cuando Tu Auto se aproxime al de atrás y quede casi paralelo a la línea de la guarnición de la banqueta. Frena, mantén el pedal apretado y pon neutral.
Para acomodar el vehículo vuelve la posición de ruedas a línea recta, suelta el freno, pon primera marcha y avanza regulando la velocidad con el embrague.
Al avanzar, ajusta en paralelo la unidad con movimientos de volante, con marcha hacia atrás y adelante.
Verifica que las ruedas queden derechas y apaga las luces intermitentes.