CULIACÁN._Alexandre Dumas, autor de Los Tres Mosqueteros, describe a Aramis como un joven delicado, elegante y caballeroso, muy amigo de Athos y Porthos, lleno de aparentes contradicciones: mosquetero sin vocación pero excelente y temerario espadachín; siempre a punto de profesar en el clero.
Desconozco si Enrique Gil Escalera alguna vez quiso ingresar al sacerdocio, lo que si es claro es que esto de "temerario espadachín" le quedaba muy bien.
Y es que según lo que narra el tercero de sus cinco hijos y primer varón, Enrique Gil Vargas, su padre fue novillero y árbitro profesional, cronista taurino, amante del beisbol, productor televisivo impulsor del certamen Nuestra Belleza.
Es reconocido como uno de los mejores cronistas taurinos de Sinaloa y México. Hizo tres programas principales en Televisoras Grupo Pacífico: Torerías, en Culiacán; Burladero taurino y A los toros. Ambos en Mazatlán. También escribió crónica en Noroeste y en el Sol del Pacífico. Fue en este último donde se adjudicó el apodo de Aramis.
"En el mundo de los toros es muy socorrido el seudónimo. Mi papá escribió mucho tiempo esa columna en el Sol del Pacífico", recordó su hijo.
"La gran pasión en su vida personal fueron los toros. Fue un cronista taurino y se convirtió en uno de los videógrafos taurinos más importantes de México".
Según su hijo, Gil Escalera toreó en las mejores plazas de México, fue un novillero importante. Pero su ascenso fue truncado por los controladores de corridas de toros y toreros que le impidieron avanzar con paso natural.
Enrique Gil Escalera falleció el lunes a las 21:45 horas de cáncer en el hígado. El mal fue detectado en enero de 2009.