"Lleva Coca-Cola felicidad a niños de casa hogar en Mazatlán"
MAZATLÁN._ Era su fiesta, los niños emocionados se congregaron en el patio donde retumbaba la música, había piñatas, comida y pintacaritas. Por un momento, los niños olvidaron el vacío de una familia.
La celebración inició a las 16:00 horas en la casa hogar Ejército de Salvación, en El Venadillo; hasta el lugar personal de Coca-Cola Mazatlán llegó con su donativo: despensa, juguetes y miniferia como regalo por el Día del Niño.
"Aquí estoy bien, muy a gusto", dijo Claudia, una niña de 11 años que sólo los fines de semana disfruta a sus papás. Hace tres años llegó a la casa hogar donde encontró mejores condiciones de vida. Hoy cursa el cuarto grado de Primaria y está contenta.
Como ella, decenas de niños compartieron sonrisas en su fiesta por el Día del Niño y la Niña. Algunos pequeños se emocionaron dibujando, otros buscaron los pintacaritas y ansiaban el momento de romper la piñata.
"Agradecemos a Coca-Cola que nos ayudó con estas necesidades. Hicimos la petición y aquí están", dijo Azhael Flores, director de la casa hogar Ejército de Salvación, que este año cumple medio siglo de altruismo en el puerto.
El donativo de la compañía llegó a tráves de Rafael Pérez Guevara, supervisor de Almacén, él representó a los empleados.
"Este es una aportación de los trabajadores a través del Comité Volar. Es una donación para los niños", dijo una de las trabajadoras de Coca-Cola.
Los niños no pararon de sonreír, siempre contentos.
La casa hogar Ejército de Salvación también llega a niños de escasos recursos de colonias cercanas, y ayer invitó a menores de Valles del Ejido y Felicidad, todos convivieron en la miniferia.
"Yo estoy dibujando un tiburón", aseguró Jesús, de 6 años, mientras señalaba la imagen de un tiburón.
El donativo de Coca-Cola dejó contentos a los niños de la casa hogar, por momento olvidaron la falta de una familia.
Azhael Flores aseguró que algunos niños son huérfanos, otros llegaron abandonados por sus padres, algunos más fueron liberados de encierro y maltrato, a otros no los pudieron cuidar sus abuelos.
En Ejército de Salvación encontraron un refugio.
