"Malecón"

"Dos medidas"
MALECÓN
06/11/2015 07:25

    ¿El cierre de las avenidas Del Mar y Camarón-Sábalo (del Tony's a Dairy Queen) en los días fuertes de Semana Santa era sólo para autos, camionetas y camiones? Hacemos la pregunta porque a pesar de que esta última vialidad estuvo atascada de personas, las motos y cuatrimotos estuvieron circulando sin ninguna restricción, no obstante el riesgo de que atropellaran a alguien.
    Como ocurre siempre, las autoridades utilizan dos varas para medir, ¿no se suponía que el cierre iba a ser en general, para todos?
    Por cierto, el operativo en cuestión dejó en claro -por lo menos así lo entiende este Centinela- que lo que se pretendía era darle prácticamente la carta de opinión favorable a esa zona turística para que funcione, como ha venido ocurriendo desde hace unos cinco años más o menos, como una cantina gigante.
    Incluso por el sonido de una enorme carpa se estuvo invitando sin ningún rubor a acercarse a comprar ambarinas "para pistear al estilo Sinaloa".
    Si esa es la clase de turismo que se quiere promover estamos más que fregados.

    ¿Y las cámaras, apá?
    Ayer el Alcalde Jorge Abel López Sánchez dijo que a pesar del asesinato de un joven en la playa de la Zona Dorada y la muerte por inmersión de un adolescente en el Río Presidio, el saldo del operativo de vigilancia de Semana Santa puede considerarse positivo, al grado de que Mazatlán fue catalogado como el municipio más seguro de la entidad.
    Lo que le faltó informar al Alcalde fue si funcionaron o no las cámaras de video que supuestamente se instalaron en puntos estratégicos de la zona turística como parte del operativo de seguridad.
    ¿Habrán captado el zafarrancho que se registró en la playa y que culminó con la muerte a navajazos de ese joven, y otro más resultó herido?

    Retraso en la Picachos
    Para mañana está prevista la reunión de los legisladores estatales con los comuneros que previo a la Semana Santa tomaron las oficinas del Fihsin y bloquearon la avenida Camarón-Sábalo.
    Se supone que los diputados deberán traer respuestas concretas a las demandas que hicieron los representantes de las familias que resultarán afectadas por la Presa Picachos.
    Por cierto, Alejandro Higuera comentó ayer en Culiacán que la presa no quedará lista en junio como estaba previsto, sino muy probablemente hasta fines del presente año, porque se detectó una falla en el subsuelo, "algo técnico", que provocó un retraso en la obra.
    Sin embargo, de acuerdo con el legislador panista, para el 15 de mayo quedarán listos los seis nuevos pueblos a los que será reubicadas las familias de Puerta de San Marcos, San Marcos, Las Iguanas, Casas Viejas, El Placer y Copales, que son las comunidades que quedarán cubiertas por el agua de la presa.
    "Ya van a contar con agua, luz y drenaje, ya están construyendo las clínicas y las escuelas", señaló.

    Hordas perredistas
    A tal grado llega la confrontación perredista en el proceso de elección del nuevo dirigente nacional, que ese partido en lugar de estar integrado por "tribus" parece estar conformado por "hordas".
    El domingo 16 de marzo el partido del sol azteca realizó los comicios para renovar su dirigencia formal o institucional en el país, y a la par elegir las cabezas de los 32 comités estatales, pero ya pasó más de una semana y es hora de que no pueden desentrampar el proceso y, menos, declarar un ganador.
    Los principales contendientes, Alejandro Encinas, de Izquierda Unida, y el eterno candidato Jesús Ortega, de Nueva Izquierda, se acusan mutuamente de chapuzas electorales y mantienen bloqueado el conteo de los votos en nueve estados.
    Además descalificaron a la Comisión Técnica Electoral, cuyo presidente es Arturo Núñez, lo cual pone en entredicho al árbitro de la elección.
    ¿A qué marketingólogos electorales se les ocurriría bautizar a las principales corrientes como Izquierda Unida y Nueva Izquierda?, si a los perredistas no los caracteriza precisamente la unidad ni la renovación?
    El líder moral del PRD, Cuauhtémoc Cárdenas, considera que lo más sano para el partido es que se anule la elección y se convoque a un nuevo proceso.
    Quizá los años, que ya le pesan al "Cuatemochas", lo hacen albergar la ilusión de que en el instituto que fundó tras renunciar al PRI aún puede darse la democracia, pero el "Ingeniero" hace como que olvida que el problema no radica en los procesos, sino en las personas y los grupos en los que se alinean.
    Columnarmente consideramos que repetir la elección sería como reeditar un proceso turbio, pero con los ánimos aún más enconados y la alquimia electoral fermentada al máximo.
    Quien se ha mantenido al margen públicamente es Andrés Manuel López Obrador, prefiere conservar los labios bien apretaditos porque sabe que el Peje por la boca muere. El tabasqueño ha sido señalado a lo largo del proceso como padrino político de Encinas.
    ¿Por qué ahora no grita: "Voto por voto, cajilla por cajilla"?
    ¿Admitiría AMLO que Ortega se declarara "dirigente legítimo" del PRD?
    Otro elemento que despide fuerte hedor a pasado electoral fraudulento es la designación de Arturo Núñez al frente de la Comisión Técnica Electoral. ¿Acaso los perredistas tienen memoria de gallina?
    Núñez arrastra un colón más largo que las filas en casas de empeño y préstamos tras los gastazos durante la Semana Santa.
    Es un tenebroso personaje que operó el fraude electoral en 1988, que llevó ilegítimamente a Carlos Salinas de Gortari a la Presidencia, y fue director ejecutivo del Instituto Federal Electoral en 1993-94, antes de que ese órgano se ciudadanizara.
    ¿Ya aqueja el Alzheimer a Cárdenas? ¿No le hace recordar nada el nombre de Arturo Núñez?
    Si de plano los perredistas no pueden elegir por la vía institucional a quien dirigirá oficialmente al partido, deben buscar un método de selección innovador.
    Por ejemplo, que el nuevo dirigente nacional sea aquel candidato que haga el castillo de arena más alto en las playas artificiales del Distrito Federal.
    Pero como en el PRD no tienen remedio (tampoco en el PRI ni en el PAN), seguramente Ortega acusaría a Encinas de adulterar la arena con cemento para que amarrara mejor, y el ex Jefe de Gobierno defeño diría que "Chucho" utilizó una palita previamente tratada con un adherente especial para erigir castillos.

    Espantan en PRD estatal
    Mientras a nivel nacional las hordas se pegan hasta con el baldecito playero, en Sinaloa el proceso duró, parafraseando a Joaquín Sabina, lo que duran dos pejes de hielo en un whisky on the rocks.
    Con un nivel de abstencionismo de alrededor del 88 por ciento del padrón compuesto por 59 mil militantes perredistas, Ramón Lucas Lizárraga fue declarado ganador al obtener 2 mil 582 votos, contra mil 997 recibidos por Heriberto Arias; mil 196 sufragios para Luis Javier Corvera Quevedo; y 924 que mereció José Antonio Ríos Rojo.
    La paupérrima votación -Lucas Lizárraga "ganó" la elección con apenitas el 4 por ciento de los inscritos en el padrón- debe poner a pensar seriamente a los integrantes del sol azteca estatal sobre el papel (¿higiénico?) político que mal juegan en Sinaloa.
    El PRD estatal es una especie de partido fantasma en el que la única que da señas de vida política es la Diputada Graciela Domínguez Nava. Fuera de la coordinadora de la nanofracción del PRD en el Congreso local, el resto de los perredistas anda en pena.

    Malecón es columna institucional de esta casa editorial.
    malecon@noroeste.com