Amigo lector de Noroeste, hablar de gota es lo mismo que cuándo le dicen que tiene el ácido úrico alto, este problema es tan añejo como la sociedad misma, este padecimiento puede ser agudo y volverse crónico, pero será usted quién pueda controlarlo, llevando las medidas adecuadas que su médico le indique.
Esta alteración conocida como artropatía por cristales de ácido úrico o gota, es uno de los padecimientos reumatológicos más antiguos y aparatosos.
Fue llamada en algún tiempo "la enfermedad de los reyes". Existen muchos mitos sobre ésta enfermedad, pero lo que si es cierto es que hasta nuestros días es una patología muy común, presentándose a cualquier edad, aunque es más frecuente en la edad productiva.
En México es frecuente que esta enfermedad se presente como gota tofácea (tofos) y discapacidad por gota, lo cual podría ser impensable dados los recursos para tratar esta enfermedad en la actualidad.
El desarrollo de gota se relaciona con las cantidades de urato en el suero, en la mujer es de 6 mg/dl de sangre, y en el hombre es de 7 mg/dl, cuando se encuentra por arriba de estos parámetros se habla de uricemia o gota, manifestándose por dolor articular, que puede llegar a la incapacidad.
Entre los factores que condicionan el aumento del ácido úrico en la sangre tenemos: desórdenes dietéticos (aumentó de consumo de proteína), empleo de ciertos fármacos (diuréticos tiazidicos), quimioterapias, enfermedades como insuficiencia renal, hipotiroidismo o hiperparatiroidismo, y factores genéticos del metabolismo de uratos, que se reflejan a nivel tubular renal en una reducción de la excreción de este.
En México se realizaron investigaciones recientes en cinco diferentes regiones, donde se encontró una prevalecía de gota en un 0.3 por ciento en la población general.
También se encontró que la gota ni necesariamente se va a elevar la concentración de uratos en la sangre.
Gota aguda, la localización y rapidez en su evolución son determinantes en el diagnóstico clínico. La descripción característica es la afección de la primera articulación metatarsofalangica, por lo general monoarticular, manifestándose por hipersensibilidad e inflamación.
La gota crónica se manifiesta por dolor y aparición de tofos tanto intraarticulares como subcutáneos. Por esto la importancia de realizar actividad física y tener una dieta balanceada, principalmente en las proteínas.