"Mujer, árbol de la vida"

Con una importancia determinante dentro de la sociedad, tanto en la célula familiar como en el entorno social y laboral, la mujer debe mantener su salud en buen estado para realizar su proyecto de vida. 

Históricamente, la identidad femenina se asocia a la maternidad, a la crianza y al hogar, y aunque desde hace algunas décadas esto empezó a cambiar, es un hecho que la mujer sigue relegada en espacios de menor jerarquía social con respecto a los varones. 

Si bien cada ser humano nace con un cierto sexo, esta característica biológica de los cuerpos no le convierte automáticamente en mujeres o en hombres, sino que también se aprende a ser mujer o a ser varón, es el resultado de una construcción cultural y social. 

Por supuesto, ya no hay un único modelo de mujer, el rol estereotipado ha evolucionado, el ser mujer varía según las condiciones y el contexto de cada una y sus distintas etapas en la vida. 

Frente a esto, el factor salud es preponderante para la búsqueda y logro del ideal forjado a nivel personal del modelo femenino: un ser independiente, con preparación académica, empoderado, saludable y feliz. 

De acuerdo a los registros de la Organización Mundial de la Salud, en promedio las mujeres viven de seis a cinco años más que los hombres, la esperanza de vida al nacer de las mujeres es de más de 77 años, mientras que los hombres es de 72. 

En contraparte, las niñas tienen muchas más probabilidades que los niños de padecer abusos sexuales, los traumatismos por accidentes de tránsito son la principal causa de mortalidad entre las adolescentes y cerca de medio millón de muertes maternas se registran cada año en todo el mundo. 

Las mujeres son más propensas que los hombres a la depresión y la ansiedad, se estima que 73 millones de mujeres adultas sufren cada año en el mundo un episodio de depresión mayor, aproximadamente un 13 por ciento de las mujeres la padecen en el año siguiente al parto. 

El cáncer de mama es el tipo de cáncer que más muertes ocasiona entre las mujeres de 20 a 59 años y a nivel mundial, las enfermedades cardiovasculares, antes consideradas un problema "masculino", ya son la principal causa de mortalidad entre las mujeres adultas. 

Así, aunado a la lucha por la equidad de género, la mujer debe continuar luchando por gozar de mejores condiciones de salud e higiene para alcanzar un óptimo desarrollo, ante su condición de dadora de vida, ya que en su seno está el futuro de la existencia humana.

Desde frágil flor hasta un fuerte árbol 

Las mujeres tienden a vivir más que los hombres, por lo que representan una proporción cada vez mayor de la población anciana, a nivel mundial, en 2007 el 55 por ciento de los adultos de 60 años o más eran mujeres, y entre los de 70 años o más eran el 58 por ciento. 

Sin embargo, las niñas tienen más probabilidades que los niños de sufrir violencia sexual de cualquier tipo: un 8.7 por ciento de niños frente a un 25.3 por ciento de niñas, a nivel mundial. 

Mientras que en materia de salud mental la OMS registra que los suicidios y los trastornos mentales contribuyen a la mortalidad de las mujeres, de hecho, el suicidio es la séptima causa de muerte entre las mujeres de 20 a 59 años.
Las enfermedades crónicas, en especial las cardiovasculares y la EPOC, son la causa del 45 por ciento de las muertes de mujeres de 60 años o más. 

La mayoría de los problemas de salud de las mujeres de edad avanzada se relacionan con factores de riesgo que aparecen en la adolescencia y la edad adulta, como el consumo de tabaco, el sedentarismo, la sexualidad y las dietas malsanas.

8 DE MARZO
A nivel mundial se conmemora el Día de la Mujer, una fecha para recordarle a la sociedad la urgencia de abatir las desigualdades de género y mejorar las condiciones de vida de las mujeres.

SER VIOLENTADO
La violencia contra la mujer ocurre en todo el mundo. La mayoría de las agresiones provienen de varones con quienes hay una relación y cada vez se utiliza más la violencia sexual como táctica de guerra. Los abusos favorecen los casos de enfermedad mental, embarazos no deseados y abortos.

SER CONTAGIADO
La incidencia de la infección por VIH/Sida es alta en casi todos los países. Tener relaciones sexuales poco seguras, y a menudo no deseadas o forzadas, pueden hacer que contraigan el VIH/SIDA y otras enfermedades de transmisión sexual. Además de dar lugar a embarazos no deseados y abortos.

SER QUE FLORECE
Cada año, ocurren cerca de medio millón de muertes maternas en el mundo, 85 por ciento por falta de acceso a servicios de salud. En México, la Secretaría de Salud da control prenatal gratuito, y el Seguro Social obliga a la trabajadora afiliada a sumar al menos seis consultas para darle la prima de incapacidad por maternidad.

CUERPO QUE DA VIDA
Las complicaciones del embarazo son una importante causa de mortalidad entre las jóvenes de 15 a 19 años; los abortos practicados de forma clandestina y la falta de un control prenatal en la madre contribuyen en gran medida a esas muertes.

SER ENFERMO
El cáncer del cuello uterino es el segundo tipo de cáncer más frecuente en la mujer y los cánceres de mama, pulmón y colon están entre las 10 causas de muerte más frecuentes en mujeres adultas, junto a los infartos al miocardio y accidentes cerebrovasculares.

SER INTOXICADO
Las adolescentes consumen cada vez más tabaco y alcohol, lo que pone en peligro su salud, sobre todo en una etapa posterior de su vida. El inicio en el consumo de estas sustancias ocurre cada vez en edades más tempranas, incluso desde los 10 años.

SER DE RAÍCES FUERTES
Las mujeres encabezan 84 por ciento de los hogares monoparentales en México; en la mayoría, su edad se encuentra entre los 30 y los 59 años, al dirigir un hogar sin pareja además del cuidado de l@s hij@s, trabaja para su sostenimiento.

1, 391, 560
Mujeres viven en Sinaloa.

84%
De los hogares monoparentales en México los dirige una mujer.

8 de cada 100
Mujeres mexicanas de 15 años o más no saben leer ni escribir. (Fuente: INEGI)