"Nuevo episodio en la 'novela' Pilarica"
Gabriel Cota Luque
LOS MOCHIS._Gritos, hincados, acusaciones, amenazas, descalificaciones y demás lindezas surgieron en un nuevo capítulo de la lucha de vecinos que se oponen a la construcción de una gasolinera en el cruce de los bulevares Pedro Anaya y Antonio Rosales.
El grupo de habitantes de la privada Quinta Real, que encabeza el rechazo a la obra, se apersonó poco antes del mediodía de este miércoles en Palacio Municipal con una sola intención: ser recibidos y dialogar única y exclusivamente con el Alcalde Zenén Aarón Xóchihua Enciso.
Atrás dejaban los encuentros que anteriormente habían sostenido con otros funcionarios de la administración municipal, como el secretario de la comuna, Zenón Padilla Zepeda, a quien ahora ya no quieren como interlocutor, mucho menos a la directora de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Solangel Solano Fierro, a quien ya habían hecho llorar en anteriores encuentros.
Los vecinos llegaron a Palacio Municipal para protestar por la reanudación en los trabajos de construcción de la gasolinera, luego de que el propio Zenón Padilla llegara y levantara los sellos de clausura instalados la noche del jueves.
Mientras esperaban en la explanada de la Plaza Cívica los vecinos buscaban afanosamente un contacto telefónico con Marco Galaviz, el asistente particular del Gobernador de Sinaloa, Mario López Valdez, quien en una primera instancia había ofrecido su apoyo pero ahora sólo respondía que el mandatario estatal se encontraba ocupado y que luego regresaría la llamada.
El grupo de inconformes se dirigió hasta la recepción de la Presidencia Municipal, recibiendo la promesa del secretario de la Presidencia, Jacob Efraín Pérez Heras de que en 15 minutos serían atendidos por Xóchihua Enciso, quien acababa de llegar a su despacho.
"Se ve, se siente, Quinta Real está presente", gritaban los manifestantes de una lucha a la que en esos momentos sumaba la adhesión de los dirigentes del Comité de Colonos y otras personas que se encontraban en los pasillos, entre ellos algunos integrantes de la agrupación Morena, esa que apoya a Andrés Manuel López Obrador.
Pasaban los minutos y crecía el desespero entre los vecinos que se metieron hasta los cubículos de los regidores, obligándolos a sumarse a su lucha y a acompañarlos en la audiencia que sostendrían con el Alcalde.
Poco a poco se fueron sumando más ediles y hasta la presidenta del Comité Municipal del PRI en Ahome, Nora Alicia Arellano Chávez, lo que de alguna manera molestó a algunos regidores y funcionarios municipales.
Por fin, luego de mas de dos horas de antesala, los vecinos fueron recibidos por el Alcalde, acompañado sólo por el Síndico Procurador, José Ildefonso Medina Robles, y el director jurídico de la comuna, Marco Antonio Urquidi Miranda.
Nuevamente los reclamos, las exigencias y señalamientos de los inconformes hacia lo que consideran un sospechoso y pasivo actuar de la autoridad municipal.
El regidor panista Víctor Sinuhé Damm Ramírez, considerado por los vecinos como su aliado, pues en la privada Quinta Real vive una de sus hijas y sus nietos, intentó explicar los antecedentes del conflicto, que datan de dos administraciones municipales anteriores, pero fue callado por los vecinos que dijeron ya conocer la historia y que por eso ya no habían votado por el PRI.
Los manifestantes le recordaron a la autoridad municipal el apoyo que de su parte recibieron en la pasada contienda electoral, y la mala respuesta con la que ahora les pagan, al preferir apoyar a los millonarios dueños de La Pilarica.
De rodillas, la señora Dora Arreola suplicó a Xóchihua Enciso detenga la construcción de la gasolinera, apegándose a lo que dice el Articulo 115 Constitucional, respecto a la autonomía que se da a los municipios para actuar en su jurisdicción.
Los vecinos cuestionaron a los regidores a si apoyaban al Alcalde para la aplicación del 115, con una respuesta positiva sobre todo de los de la fracción tricolor y la inconformidad del perredista Marino Avizoran, a quien no le gustó la politización que tiene el caso y hasta trajo a la platica la supuesta desaforación del entonces jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador.
Zenén Xóchihua se mantuvo en su postura de no poder hacer otra cosa más que atender la ley, para lo que habrá de darse respuesta a la resolución emitida por el Tribunal de lo Contencioso Administrativo, que al parecer da la razón a los empresarios para continuar con la obra, para lo que incluso ya se levantaron los sellos de clausura.
Como alternativa, ofreció la posibilidad de buscar un acercamiento con los empresarios Artola, dueños del consorcio gasolinero, a quienes plantearían la inconformidad existente y la posible negociación del caso.
Los vecinos insistían en la clausura de los trabajos de construcción, sin importar que los empresarios logren posteriormente un nuevo resolutivo a su favor.
"No voy a clausurar porque tu lo dices, o acaso ¿eres tú el presidente municipal?", encaró Zenén Xóchihua a quienes exigían la clausura de la obra, en un tono ya de marcado enojo por parte del titular del Poder Ejecutivo Municipal.
Los vecinos, ante la negativa de clausura, optaron por abandonar el despacho presidencial, no sin antes hacer patente su inconformidad por la postura asumida por el Alcalde y al futuro replanteamiento de sus acciones de protesta, que ahora esperan dirigir a instancias estatales y federales.