"Paradero: fosas clandestinas en Sinaloa"

CULIACÁN._ Alejandro López Serna se llama. Desde que se toma camino a El Fuerte se logra ver su fotografía y los datos de aquel 20 de julio de 2014 que desapareció, está colgada en un puente de la comunidad de La Constancia, junto a la de otras personas que tienen su misma suerte. Mezquina y de dolor.

El viernes se cumplieron ocho meses. Su madre, Reyna Serna, lo busca. Por señales que le dieron unas personas anónimas dio con una fosa, que el 2 de octubre encontraron unos trabajadores del gasoducto que pasa por San Blas.

Ahí había restos humanos y ropa, un pantalón de mezclilla, como el que tenía puesto Álex, como le dice su madre, el día de su desaparición.

Los peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado tomaron las muestras, las embolsaron y se las trajeron a Culiacán, donde le prometieron que las enviarían a un laboratorio especializado para análisis de ADN, que tardarían tres meses, que era rápido. Ya pasaron 5 meses y 20 días y Reyna aún no sabe si esos restos eran los de Álex.

"Hasta el día de hoy no hay rastros de mi hijo, sólo los restos humanos que han mandado a México a analizar desde el 15 de octubre, y tampoco he obtenido resultados. ¿cómo que una madre todavía debe enfrentar la burocracia del papeleo, después del sufrimiento que le arrebaten un hijo?", se cuestiona.

Reyna espera, prefiere decirse a sí misma que esa persona que murió y que encontraron en una fosa es su hijo. No tiene paz, eso tampoco se la dará, pero al menos sabrá dónde quedó. En una fosa.

A la búsqueda
de la muerte

no de los métodos para la desaparición de personas son las fosas clandestinas. En Sinaloa, el Gobierno reconoce 79 fosas en las que han encontrado 134 cuerpos, en el periodo que va del 1 de enero de 2010 al 31 de diciembre de 2014.

La cifra oficial de la Procuraduría sobre desaparecidos es de mil 289 personas, sólo en los 5 años recientes, es decir, desde el 1 de enero del 2010 hasta el 31 de diciembre del 2014. Son números concentrados en archivos informáticos, a los que se tienen que sumar o restar 134 personas más que fueron encontradas muertas, en fosas, como en las que buscan al resto de personas.

Es a partir de este año cuando inició el programa de atención integral de familiares de personas desaparecidas por la Procuraduría General de Justicia, en un proyecto que se planteó realizar con mecanismos de búsqueda de personas, esencialmente muertas.

Martín Robles Armenta, subprocurador General de Justicia, explicó que los acuerdos con familiares y activistas fue el de creación de mapas, de rastreo de posibles paraderos de personas en fosas, para que éstas sean buscadas por perros entrenados que deberán encontrar restos humanos, mismos que se trasladarán a la PGJE en camionetas especiales.

De ese mismo modo, se expuso la instalación de un laboratorio de genética de ADN que será dirigido por personal capacitado que ya presentó, incluso, la evaluación de control de confianza para acreditar su trabajo, mientras tanto, la PGJE se encarga de sólo ser un puente de traslado de restos, los que se encuentran en fosas.

"Si en algún tiempo es localizado un cuerpo sin vida, el cual no ha sido identificado de manera legal, los peritos, los agentes del Ministerio Público, los investigadores, pues hay acuerdos, hay circulares donde esos servidores públicos tienen que hacer la gestión para que ese cuerpo sin vida le obtengan también la muestra del perfil de genética forense", expresó.

"(Actualmente) no tenemos el laboratorio, pero en colaboración con la Procuraduría General de la República, mandamos esas muestras, las cuales también queden registradas".

Las cintas amarillas

Entonces usted viene con la gente? No puede pasar la cinta, el lugar está resguardado porque es la escena del delito, usted lo sabe que no puede pasar, déjeme hacer mi trabajo, yo no interfiero con el de usted, pero atrás de la cinta, por favor".

El diálogo parece una declaración lógica cualquiera de un policía cuando cuida una escena de asesinato, de algún robo, pero en esta ocasión fue por el hallazgo de una fosa el 5 de diciembre, cuando se exhumaron cinco cuerpos en San Blas, del municipio de El Fuerte.

Ese policía era uno de los más de 30 que estaban en ese lugar. Eran ministeriales, municipales y estatales esperando a peritos del Ministerio Público local y federal, eran policías que habían sido sorprendidos, no esperaban ver a más personas en un lugar a 30 kilómetros de la carretera, alguien que pudiera saber cuántos cuerpos había realmente.

"Nos informan que se encontraron dos cuerpos en una fosa por trabajadores del gasoducto", se escuchó en las noticias vespertinas de los noticieros de radio en Sinaloa, alguien al interior de las policías dio esa información, incluso les envió fotografías. Pero les mintió.

Después de un poco más de cinco horas de hacer trabajos de exhumación, se descubrieron cinco cuerpos en una sola fosa, la cual fue reportada por el grupo de Mujeres de los Desaparecidos de El Fuerte al Ministerio Público, ellas dieron con el lugar, no trabajadores del gasoducto que se construye a 10 kilómetros de ese lugar.

Ahí sólo había policías que cambiaban de turno para evitar que los familiares de desaparecidos pasaran la cinta amarilla.

Había personas encapuchadas, otros con caras descubiertas, eran personas que aparentaban dureza, pero que se acercaban para contar detalles de lo que se encontraba, lo hacían como un acto de caridad ante la cara de desesperación de los familiares.

Sus reacciones cambiaban como el sol de lugar. Su fortaleza, su rudeza y su pose de poder era suavizada, parecía como si algo o alguien les pidiera ser flexibles con el sufrimiento de quien buscaba a sus desaparecidos.

Fueron ellos, los policías, los que habían dado la información. Ellos lo reconocieron, pero alegaron una orden dada desde altos mandos.

Llegó entonces Evaristo Castro Borbolla, subprocurador zona norte, y su pose volvió.

"Ya le dije que no puede pasar, quédese atrás de la cinta".

¿Dónde estaban?

l norte de Sinaloa, según detallan las estadísticas de la Procuraduría General de la Justicia, pareciera ser un panteón clandestino, de los 134 cuerpos encontrados del 1 de enero de 2010 hasta el 31 de diciembre de 2014, 90 fueron hallados en esa región, es decir, el 67 por ciento.

Los poblados donde se han encontrado cuerpos enterrados de manera clandestina son Batamote, Agiabampo, Bateve, San Blas, Ejido Primero de Mayo, Los Pinitos, Bacubirito, La Bolsa de Tosalibampo, Bachobampo, Jesús María, Estero Juan José Ríos, San José de Ahome, Jitzamuri, Playa La Robalera, Loma de San Pablo, El Bule, el Valle del Carrizo, Guachipori, Las Chaparreras, Mochicahui, Ejido Águila Azteca y Topolobampo.

Los 44 cuerpos restantes están distribuidos en la región sur y el centro: 27 y 17 respectivamente.

Los del sur se han encontrado principalmente en Mazatlán, incluso en la zona urbana, como en la Colonia El Porvenir, también en la Sindicatura Miravalles, la Comunidad de La Amapa, La Pedrera, Las Higueras, El Tecomate, La Noria, Villa Unión, El Vainillo y El Recodo.

En la región sur también se han encontrado cuerpos en El Rosario, San Ignacio y Elota, son menos los cuerpos en esos lugares, pero siguen en el radar.

En la zona centro de Sinaloa, Culiacán es donde se registran más hallazgos, poblados como el campo pesquero Las Arenitas, Costa Rica, Mojolo, Vinoramas, la Colonia Bachigualato y el fraccionamiento Estanza Toscana.

También habrá que sumar los poblados de Buena Vista y Caitime de Salvador Alvarado, la Playa El Tambor de Navolato, El Playón y el Campo Pesquero La Reforma, en Angostura.

¿Quién los encuentra?

a Procuraduría General de Justicia guarda los registros de fosas, sin embargo, éstos no mencionan por quiénes fueron encontradas, ni de qué forma, sólo detallan los lugares y el número de cuerpos.

Sin embargo, éstos, de acuerdo con información de los grupos de Familiares con Hijos Desaparecidos del centro y norte de Sinaloa, son reportados por trabajadores del campo o por ellos, después de que realizan búsquedas en lugares que les son indicados con mensajeros anónimos, a través de cartas, mensajes por redes sociales o llamadas.

Noroeste documentó el 5 de diciembre el hallazgo de cinco cuerpos en una fosa en San Blas, del municipio de El Fuerte, la cual se encontró por los Familiares con Hijos Desaparecidos del Norte de Sinaloa, luego de que un mensajero anónimo dio indicio de dónde podían localizar cuerpos, los cuales hoy siguen siendo analizados por la PGR.

La Procuraduría está buscando muertos, cuerpos de personas que desaparecieron, al menos así lo indican sus protocolos, pese a que el reclamo de las víctimas, de sus familiares, es que regresen vivos, como se los llevaron.


¿Dónde estaban los desaparecidos?

En Sinaloa se han encontrado 134 personas en 79 fosas, la mayoría en el norte del Estado.


REGIÓN NORTE

Municipio Número de cuerpos Número de Fosas

El Fuerte 21 58

Ahome 58

Guasave 8

Sinaloa de Leyva 3

TOTAL 90

REGIÓN CENTRO

Municipio Número de cuerpos Número de Fosas

Culiacán 8 10

Angostura 4

Salvador Alvarado 2

Navolato 3

TOTAL 17

REGIÓN SUR

Municipio Número de cuerpos Número de Fosas

Mazatlán 21 11

El Rosario 2

Elota 3

San Ignacio 1

TOTAL 27





Crimen Cifra Periodo

Homicidio 7,818 Enero2010/Diciembre2011


Desaparecidos 1,289 Enero2010/Diciembre2011


Cuerpos en fosas 134 Enero2010/Diciembre2011