"Prostitución: Sexo sin control"
MAZATLÁN._ Cuando la noche cae en Mazatlán de ella emergen mujeres y hombres que ofrecen sus cuerpos al mejor postor.
Pero este oficio ahora ha "abandonado" la clásica casa de citas o las salas disfrazadas de masaje; ahora la prostitución está en todos lados: afuera de entronques, en avenidas, en gasolineras, afuera de casas viejas que se autonombran moteles y hasta en zonas ubicadas a escasos metros de panteones.
Al filo de la media noche de un sábado, las camionetas se detienen en la Avenida Gabriel Leyva, casi frente al Fraccionamiento El Bosque. Este es uno de los puntos en donde hombres y mujeres ofrecen sus servicios sexuales.
Con el sonido del claxon de una camioneta sale un travesti de minifalda entallada, cambia algunas impresiones con un posible cliente. No hay acuerdo. El sexoservidor mira hacia la cámara como buscando otra cita. Es una de esas noches difíciles, así lo demuestran los gritos de burla de parte de otros automovilistas.
El recorrido se prolonga por el Libramiento Colosio, a la altura de Villas del Rey, de la Colonia Salvador Allende, a la entrada al Infonavit Alarcón y en el entronque a El Venadillo.
Por la gasolinera de Villa Unión, en el bulevar de la Sindicatura, afuera de moteles ubicados al norte y sur de la ciudad, en cantinas y los llamados centros botaneros.
Todo esto no sería peligroso si todos los que ofrecen sus servicios estuviesen regulados sanitariamente, pero en la realidad no es así.
Son sólo tres Inspectores de Sanidad de la Dirección de Servicios Médicos Municipales para revisar diariamente hasta a 230 sexoservidores. Es decir, cada uno debe inspeccionar a 76 personas.
Documentos en poder de Noroeste, proporcionados por un ex inspector de Sanidad que fue despedido el año pasado, revelan que las rutas de inspección apenas se centran en casas de citas, centros de masaje, cantinas y algunos moteles.
Pero no hay regulación en la prostitución en calles y mucho menos se controla el sexoservicio que se "teje" a través de teléfonos celulares que se anuncian en los periódicos.
De esta lista de revisiones proporcionada por Ricardo Reyes Valdez, ex inspector de Sanidad de Servicios Médicos Municipales, se desprende un posible acto de omisión que involucra al equipo conformado con apenas tres personas.
La presunta omisión y protección permitió incluso que una mujer siguiera trabajando durante dos semanas pese a que resultó positiva del virus del VIH, en dos exámenes practicados en noviembre del año pasado.
Según el documento, Reyes Valdez reportó hasta en tres ocasiones que la mujer, a la que se llamará María N. para respetar su identidad, estaba contagiada de VIH, pero siguió laborando durante dos semanas en un centro nocturno ubicado en el Libramiento Colosio.
Mediante reportes elaborados por tres semanas va relatando la manera en que no se actuó para retirar del sexo servicio a María N.
Raymundo Partida Flores, director de Servicios Médicos Municipales, admite que a María N. sí se le detectó el virus del VIH, pero fue retirada a tiempo y canalizada al Cisida, en el Centro de Salud.
Descarta los escritos del ex inspector y asegura que fue despedido por actos de corrupción, pero no refiere qué tipo de actos y tampoco mostró algún documento de la Contraloría Municipal sobre la baja de Reyes Valdez.
"Sí se le diagnosticó, pero fue retirada inmediatamente, nosotros tenemos precaución y un cuidado en este tipo de situaciones, el inspector fue retirado por actos de corrupción", afirma.
Lo cierto es que el destino de María N. es desconocido, porque aunque Partida Flores afirma que fue retirada del negocio y canalizada al Cisida para el tratamiento, nadie garantiza que no pueda regresar a ofrecer sus servicios de manera clandestina.
SEXOSERVICIO
Denuncian protección
Carencia de inspectores, tardanza en le entrega de resultados de análisis de VIH, oferta callejera de sexo y protección de policías a grupos de prostitutas son sólo una muestra de que en las noches todo puede suceder
Adrián Luján
MAZATLÁN._ El despido de un inspector de sanidad que laboraba en el Hospital Municipal "Margarita Maza de Juárez" ha puesto al descubierto una posible protección a sexoservidoras que laboran en casas de masaje, cantinas, centros nocturnos, moteles y hasta en gasolineras.
La presunta omisión y protección permitió incluso que una mujer siguiera trabajando durante dos semanas, pese a que resultó positivo del virus del VIH, en dos exámenes practicados en noviembre del año pasado.
Documentos en poder de Noroeste revelan la forma en que un inspector que fue despedido reportó hasta en tres ocasiones que la mujer, a la que llamaremos María N. para respetar su identidad, estaba contagiada de VIH, pero siguió laborando durante dos semanas en un centro nocturno ubicado en el Libramiento Colosio.
Ricardo Reyes Valdez, quien fungió como inspector de Sanidad de la Dirección de Servicios Médicos Municipales, envió documentos en donde revela la forma en que se omitió su reporte, en donde también anexa la lista de las revisiones a sexoservidoras que laboran en Mazatlán y que forman parte del padrón del Hospital Municipal.
En uno de los documentos, dirigido a Raymundo Partida Flores, director del Hospital Municipal, la cual tiene el sello de la clínica, expresa su inconformidad por ser despedido, pero también la presunta negligencia en las revisiones a las mujeres.
Mediante reportes elaborados por tres semanas va relatando la manera en que no se actuó para retirar a María N.
Partida Flores admitió que sí se detectó a María N. con el virus del VIH, pero fue retirada de manera inmediata sin que representara ningún riesgo a terceros.
Descarta los escritos del ex inspector, ya que asegura que fue despedido por actos de corrupción, pero no refirió qué tipo de actos y tampoco mostró algún documento de la Contraloría sobre la baja de Reyes Valdez.
"Sí se le diagnosticó, pero fue retirada inmediatamente, nosotros tenemos precaución y un cuidado en este tipo de situaciones. El inspector fue retirado por actos de corrupción", afirmó.
En uno de los escritos del hoy ex inspector señala en base a un parte informativo de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, con fecha 16 de agosto de 2008, la presunta protección que daba el extinto comandante de la partida de Villa Unión, Eduardo Quintero Pasos, a sexoservidoras y a propietarios de cantinas en donde se practica la prostitución.
Quintero Paso,s a quien apodaban "El Chicles" murió durante un enfrentamiento a balazos con presuntos gatilleros en la comunidad de Puerta de Canoas.
En el parte que fue elaborado por el Primer Oficial de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, José Luis Cabanillas Medina, especifica que Quintero Pasos, quien dirigía la Patrulla 300, se molestó por la detención de siete sexoservidoras que estaban laborando afuera del bar Ancla de Oro, argumentó que entre las detenidas había una familiar.
La serie de documentos van dirigidos a la Comisión de Salud de Cabildo, a la Presidencia Municipal y a funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública como al titular Jesús Gilberto Acuña Armenta y al director de la corporación,Trinidad Tirado Olvera.
Niega Partida que se de protección
Adrián Luján
MAZATLÁN._ Raymundo Partida Flores, director de Servicios Médicos Municipales, señala que el caso de María N. fue canalizado al Centro de Sida del Centro de Salud, porque la institución a su cargo carece de un programa para dar seguimiento a los casos de VIH detectados.
"A ella, en cuanto se le diagnóstico la enfermedad, se le retiró de laborar y fue canalizada al Cisida, del Centro de Salud, ellos le dan seguimiento en estos casos tanto en lo sicológico como en la salud", expone.
"Desafortunadamente nosotros no disponemos de recursos para emprender este tipo de programas".
n ¿Pero no cree que María N. pueda regresar a laborar? ¿Cómo se garantiza que será detectada?
"En caso de que se le detectara pues se le detiene porque no tiene permiso", responde.
n ¿Hay capacidad?, ¿por qué sólo son tres inspectores para cubrir todo el municipio en donde hay más de 200 sexoservidores en el padrón?
"Porque no hay recursos para hacer más contrataciones, estamos muy limitados en ese sentido", asegura el médico.
Partida Flores desestima el escrito de Ricardo Reyes Valdez, porque refiere que ya tenía antecedentes de malos manejos cuando fue inspector, pero en el área de Comercio.
"Él salió del hospital por malos manejos y actos ilegales, por eso los escritos los descartamos. A la joven sí se le retiró a tiempo".
También indica que los resultados de los exámenes del VIH en el Hospital Municipal tardan una semana para darse a conocer a la persona.
Este es un amplio periodo de tiempo, porque hay asociaciones y clínicas en donde los diagnósticos se dan a conocer en apenas cinco minutos.
DE LA SOSPECHA A LA PROHIBICIÓN
Un total de 21 días pasan entre la sospecha de la existencia de VIH y el retiro de una
5 de noviembre
n El inspector de Sanidad, Ricardo Reyes Valdez, sospecha que María N., quien trabajaba en un table dance del Libramiento Colosio ejerciendo la prostitución, tiene sida. Ese día la sexoservidora pagó por el examen de VIH pero no acudió a la revisión programada para el 10 de noviembre. Según el listado en poder de Noroeste otras 40 mujeres fueron inspeccionadas debidamente. Además de María, otras nueve mujeres faltaron a la revisión.
12 de noviembre
n De acuerdo al listado, finalmente le fue practicado el examen de VIH a María N.
19 de noviembre
El 19 de noviembre está listo el resultado del examen de María N. y es positivo. Así se lo dio a conocer Reyes Valdez, entonces inspector, a su jefe, sólo identificado como Amílcar. A la mujer se le dejó seguir trabajando.
20 de noviembre
n Se le practicó a María N. otro examen para confirmar el diagnóstico.
26 de noviembre
n El exámen de María N. resultó nuevamente positivo de VIH Se le notifica a ella del resultado del examen y se le impide que siga trabajando.