"¿Quieres un piercing? ¡Elige con cuidado!"
Perforarse la nariz con fines estéticos se ha vuelto una práctica cada vez más común entre los jóvenes, si bien consiste en hacerse un agujero en una parte del cuerpo, para muchos es cool, atractivo y hasta sexy, independientemente de lo doloroso y riesgoso que puede llegar a ser.
Al igual que ocurre con los tatuajes, los piercings no implican que sea un procedimiento muy doloroso si se hace con profesionistas y ciertas medidas de higiene, con el fin de evitar correr riesgos innecesarios, como puede ser el exponerte a infecciones.
Existen muchos sitios en la ciudad donde se ofrecen servicios de piercing, aunque con un poco de valor y un par de tequilas cualquier amigo o amiga podría también ayudarte con la perforación, pero si ya lo decidiste recuerda: ponte en manos de profesionistas certificados.
Un servicio seguro que realice perforaciones de modo profesional debe ofrecer medidas de higiene y seguridad necesarias, tener experiencia y buenas referencias y hacer un trabajo a conciencia, que no atiende a menores de 18 años sin la autorización de sus padres.
De ser un sitio serio, incluso harán una ficha personal en donde, además de los datos personales, tendrá que estar firmado el permiso de los padres si es menor, también dará constancia de medicamentos que puedas estar tomando y si eres alérgico a algo.
Luego del papeleo, viene lo emocionante: la perforación. Claro, previamente deberás llevar el arete o argolla que lucirás.
Lo primero es desinfectar la zona a perforar, la persona que te atienda debe traer guantes quirúrgicos, luego marcará con un rotulador especial el punto exacto, te lo mostrará en un espejo para que lo apruebes.
Tomará una aguja que en su extremo tendrá incrustada la joya que debe colocarte; pasará la aguja por el punto escogido y, sin duda te dolerá, una vez perforado, limpiará posibles restos de sangre que haya en la zona y te mostrará en un espejo cómo te quedó; los primeros días sentirás que la zona está un tanto enrojecida, sensible y algo dolorida, pero es normal.
Por último, el profesional te dirá los cuidados que debes tener, como por ejemplo: con qué producto limpiar la zona y cómo hacerlo, no maquillar la zona para evitar infecciones y no cambiar la joya durante las primeras 6 semanas de colocada para asegurarte de que ha cicatrizado correctamente.
Es recomendable además no beber bebidas embriagantes durante las primeras semanas, comer abundantes frutas y verduras, así como agua natural, ya que estos alimentos ayudan a una prontcicatrización, en cambio el alcohol retardará que cierre la herida.
* Con información de Vivirsalud.imujer.com
