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"CON CHILE DEL QUE PICA"

"Aberraciones gastronómicas"

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28/06/2018 17:30

    Existen comidas que son Aberraciones Gastronómicas. Siempre me han caído mal los provocadores. Ya saben, esa gente que por un poco de atención hacen cosas que cruzan los límites de la dignidad, el respeto y el buen gusto; como esas obras de teatro en las que los actores se desnudan sin que parezca realmente necesario o potenciador; o como los influencers de retos que me parece el contenido más basura que ha existido, o los restaurantes que en su afán de descubrir el hilo negro y pegarle al gordo con algún videito viral hacen de nuestro reconocimiento gastronómico mundial una burla. 

    Y de eso vengo a hablarles hoy, de las Aberraciones Gastronómicas que aparecen todos los días hasta por debajo de las piedras.

    De por sí nunca apoyamos mucho la decisión de los chilangos de meter un tamal adentro de un bolillo, es que simplemente no se siente justo ni para el tamal ni para el bolillo, pero bueno, los perdonamos con el argumento de que nadie es perfecto y que siempre hay un frijol en el arroz de cada entidad federativa. Pero todo cambió cuando metieron los chilaquiles, el ceviche y hasta el helado dentro de una telera, y ahí, señoras y señores, ahí fue el acabose.

    Comenzamos a ver espectaculares anunciando la malteada de pan de muerto y la nieve de mariscos. ¡No, por favor! Y de pronto nos comenzó a atacar el sushi con poblano en vez de alga. Y cuando creímos que los superábamos en fuerzas, llegó la concha con chilaquiles y el helado de hamburguesa a servir de refuerzos; para terminar de machacar los ánimos se les unieron los veganos llamando alitas bbq a la coliflor rebosada, y haciéndonos creer que pueden sustituir con setas los camarones. 

    Dejando a un lado a los veganos, que amo su causa y admiro su determinación, no sé por qué los demás hacen lo que hacen. La gastronomía es un arte, y como arte es nuestra responsabilidad sublimar los alimentos, no ponerles una peluca y un vestido corto y lanzarlos a trabajar a las calles. 

    ¿De verdad necesita el mundo una pizza de chile relleno? ¿No era suficientemente delicioso el sencillito elote en vaso, mejor conocido como esquite? ¿Había realmente que ponerle tuétano, patita de pollo y chetos flaming hot?

    Dejemos algo en claro, no soy una quisquillosa de la comida. Francamente puedo decir que yo como de todo, tomo mezcal sin hacer caras de lagartija y no me tiembla la mano si le ponen jumiles a la salsa de mi taco. He probado escamoles, chicatanas, gusano de maguey, caguama y hasta huevos de tortuga cuando era muy pequeña y todavía no creíamos el daño que hacíamos.

    Vaya, que hasta la pizza hawaiana me como, pero la que sólo lleva piña, porque a cierta pizzería muy popular en Mazatlán se le ocurrió ponerle ademas de piña, plátano y cerezas, lo que para mí es simplemente una Aberración Gastronómica.