Brugada vs Taboada: la campaña más polarizada de la historia

Ernesto Núñez Albarrán
    @chamanesco / Animal Político / @Pajaropolitico
    Ella es la candidata idónea del lopezobradorismo; él, un perfecto antilopezobradorista. Brugada contra Taboada: a esa elección vamos y, de alguna manera, eso somos: una ciudad de desigualdades y altos contrastes.

    Son tan grandes los paralelismos como los contrastes: Clara Brugada vs Santiago Taboada protagonizarán una contienda electoral polarizada, en la que cada quien representa lo mejor y lo peor de sus partidos políticos.

    Clara Brugada fue electa Alcaldesa de Iztapalapa en las elecciones de 2018. Se reeligió en 2021 con amplio margen, fue la política más votada de su partido en esos comicios y hoy busca la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México presumiendo una buena gestión y acciones que se han convertido en un emblema de su partido-movimiento (Morena), como las Utopías, que le han cambiado el rostro a Iztapalapa.

    Santiago Taboada fue electo Alcalde de Benito Juárez en las elecciones de 2018. Se reeligió en 2021 con amplio margen, fue el político más votado de su partido en esos comicios y hoy busca la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México presumiendo una buena gestión y acciones que se han convertido en un emblema de su partido (Acción Nacional), como las luminarias azules y una policía vecinal que ha blindado a Benito Juárez.

    No es casual que Morena y el frente opositor hayan escogido a Brugada y Taboada como sus candidatos, luego de las polarizadas elecciones de 2021, en las que la capital se partió literalmente en dos, con un oriente pintado de guinda en siete alcaldías, desde Gustavo A Madero hasta Milpa Alta, y un poniente en el que PRI, PAN y PRD lograron llevarse nueve alcaldías, desde Azcapotzalco hasta Tlalpan.

    De hecho, fue Brugada quien sacó la cara por Morena en esa muy mala elección para el lopezobradorismo, que perdió más de un millón de votos en la capital, al pasar de 2 millones 726 mil votos en las elecciones de diputaciones federales de 2018, a un millón 747 mil en las legislativas intermedias de 2021.

    En ese descalabro electoral, sin embargo, Brugada ganó Iztapalapa con 393 mil votos, que representan casi una cuarta parte de los sufragios de Morena en la Ciudad. (A quienes se preguntan todavía por qué Brugada y no Omar García Harfuch, habría que recordarles que uno de cada cuatro votos de Morena en la capital es de Iztapalapa).

    En paralelo, Santiago Taboada es también el personaje emblemático del crecimiento de la Oposición en la capital en 2021. Es el alfil del grupo político panista que, desde 2009, sentó sus reales en Benito Juárez y hoy es un poderoso consorcio político, económico (e inmobiliario), que domina el PAN capitalino y los padrones panistas en la capital y otras entidades.

    El grupo, comandado por el diputado federal Jorge Romero, tiene entre sus filas a Andrés Atayde, dirigente del PAN capitalino; Christian Von Roehrich, ex Alcalde de Benito Juárez, hoy preso acusado de comandar el “cártel inmobiliario”; Luis Mendoza, diputado y próximo candidato a la Alcaldía, y Mauricio Tabe, Alcalde en Miguel Hidalgo. Apodados en su momento como Los Ocean, ellos comandan los intereses que impulsan la candidatura de Santiago Taboada.

    El hoy Alcalde con licencia fue también el más votado entre los nueve ganadores de la coalición PAN-PRI-PRD en 2021: sus 162 mil votos obtenidos en Benito Juárez representan el 10 por ciento de los 1.8 millones de votos que se llevó la Oposición en esos comicios.

    Otro paralelismo entre Brugada y Taboada es su consistencia en su vida y su trayectoria política. Ninguno militó en el PRI y ambos se formaron, muy jóvenes, en movimientos ligados a su línea ideológica.

    Brugada (nacida en 1963) estudió Economía en universidad pública (la UAM Iztapalapa), fue militante y dirigente de la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata; militó en el maoísmo y la izquierda radical de finales de los 70; ha sido Diputada local y federal, primero por el PRD y después por Morena, y su carrera política es esencialmente chilanga.

    Taboada (nacido en 1985) cursó la carrera de Derecho en la UNAM y tiene estudios de postgrado en la Universidad George Washington y la Universidad Pontificia de Salamanca. Desde muy joven militó en movimientos católicos y en las juventudes del PAN, trabajó en un despacho de abogados y, en 2006, se convirtió en asesor parlamentario de quienes después fueron sus jefes en la política: Jorge Romero y Christian Von Roehrich. Fue Diputado local antes de ser electo Alcalde.

    Si a Taboada se le vincula con el escándalo del “cártel inmobiliario”, a Brugada le tocó protagonizar el escándalo de Juanito, cuando Andrés Manuel López Obrador pidió a las huestes perredistas abandonar a su candidata y votar por el candidato del PT, a quien después obligó a renunciar a la jefatura delegacional de Iztapalapa, para colocar ahí a Brugada.

    De alguna manera, Brugada y Taboada representan lo mejor y lo peor de sus partidos.

    A la Alcaldesa de Iztapalapa se le reconoce por su autenticidad y por haberle cambiado la vida a los habitantes de las colonias del oriente de la Ciudad. Es la creadora de las Utopías, pero también encarna las prácticas corporativas y clientelares de la izquierda gobernante en la Ciudad.

    Al Alcalde de Benito Juárez se le reconoce haber gobernado una de las demarcaciones con mejor nivel de vida en el País, y mantener condiciones de seguridad y servicios públicos eficientes. Pero también encarna a un partido que extravió su ideología, sus principios doctrinarios y que, en su pragmatismo, abrazó los negocios inmobiliarios como parte de su modus operandi.

    Ambos reconocidos como astutos operadores políticos, Brugada comandará las clientelas morenistas y Taboada las estructuras panistas y priistas -y lo que queda del PRD-, en una elección como pocas.

    Brugada es la candidata idónea del lopezobradorimso; Taboada, el perfecto antilopezobradorista.

    La elección será un choque de trenes y estará marcada por el contraste entre dos perfiles antagónicos y, previsiblemente, por una peligrosa polarización que también podría caer en discursos clasistas, excluyentes y en la tentación de aniquilar al contrario.

    Brugada vs Taboada: a esa elección vamos. De alguna manera, eso somos: una ciudad de desigualdades y altos contrastes.