Los sueños son parte esencial de nuestra vida. Si no soñamos no proyectamos, innovamos ni creamos. Empero, si no ponemos los medios para concretar los sueños, éstos se diluyen y difuminan porque se convierten en vaporosa ilusión.
Habrá, incluso, muchas personas “sensatas” que intentarán disuadir a quien sueña, diciéndole que construye castillos en el aire, como señaló Alberto Cortez: “Quiso volar igual que las gaviotas, libre en el aire, por el aire libre y los demás dijeron, “¡pobre idiota, no sabe que volar es imposible!.. La conclusión, es clara y contundente, lo condenaron por su chifladura a convivir de nuevo con la gente, vestido de cordura”.
No obstante, sí se pueden construir castillos en el aire, siempre y cuando se coloquen sus cimientos, de acuerdo a la experiencia que acumuló Henry Thoreau al retirarse a vivir al bosque.
“Con mi experimento aprendí al menos que si uno avanza confiado en la dirección de sus ensueños y acomete la vida que se ha imaginado para sí, hallará un éxito inesperado en sus horas comunes” señaló.
“Si uno ha construido castillos en el aire –agregó-, su tarea no se perderá; porque ahí están bien edificados. Que tan sólo ponga ahora los cimientos bajo esos castillos”.
Thoreau recomendó evitar la prisa y la desesperación por alcanzar el éxito: “¿Por qué hemos de tener una prisa tan grande en triunfar, y en empresas tan desesperadas? Si un hombre no marcha a igual paso que sus compañeros, puede que eso se deba a que escuche un tambor diferente. Que camine al ritmo de la música que oye, aunque sea lenta y remota. No importa que madure con la rapidez del manzano o del roble”.
¿Construyo castillos en el aire sin colocar cimientos? ¿Me desaliento ante las críticas y comentarios?
@rodolfodiazf