CNTE y Sheinbaum

31/05/2025 04:01
    El gobierno de la doctora Sheinbaum enfrenta simultáneamente en esta coyuntura al crimen organizado y a la radicalización de la CNTE. Los cárteles cada vez son más agresivos y la coordinadora es mucho más fuerte como oposición política, aunque no electoral, que el PAN y el PRI juntos.

    Al mismo tiempo que la Presidenta Claudia Sheinbaum vino a Sinaloa a respaldar políticamente al Gobernador Rocha Moya se mantenía la intensidad de la guerra narca y la CNTE (Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación) radicalizaba sus acciones en pos de objetivos inmediatos: derogar la Ley de Jubilación del ISSSTE, congelación de la edad de jubilación, aumento del 100 por ciento a sus salarios, eliminación del sistema de Afores, mejora integral de las condiciones laborales y de seguridad social, abrogación de la reforma educativa de 2029, reinstalación de maestros despedidos y justicia para las víctimas de represión estatal, respeto a la bilateralidad sindical y alto a la represión contra el magisterios disidente.

    Es decir, la violencia criminal, especialmente en Sinaloa, y la movilización de los maestros afiliados a la CNTE en Michoacán, Oaxaca, Chiapas, Guerrero, Zacatecas y cinco estados más, son dos de los desafíos más relevantes de la coyuntura política nacional a finales de mayo.

    La CNTE, quien emergió al final del sexenato de José López Portillo como una expresión muy fresca que pugnaba por la democratización del sindicalismo magisterial, siempre estuvo ligada a diferentes corrientes de las izquierdas mexicanas, que iban desde el Partido Comunista Mexicano, los pequeños partidos trotskistas, los grupos maoístas y organizaciones guerrilleras.

    A pesar de sus diferencias ideológicas y de táctica y estrategia, esa miríada de organizaciones lograba en las asambleas de sus bases sindicales ponerse de acuerdo en el tipo de movilizaciones y en los pliegos de peticiones. La CNTE no tan sólo resistió los embates de los diferentes gobiernos priistas y panistas sino que se consolidó en varios estados, como los mencionados, pero también se debilitó en otros, como el Estado de México, donde originalmente había logrado una enorme presencia, sobre todo en la zona conurbada al entonces Distrito Federal.

    En Oaxaca fue donde la CNTE, a través de la sección 22, no tan sólo afianzó su liderazgo sindical sino que se extendió a otros sectores sociales a través de la APPO (Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca), cuando entre 2006 y 2016, sobre todo en 2006, logró una movilización popular como pocas veces se ha visto en la historia reciente de México.

    Fue, justamente en ese año, cuando aparecieron en Oaxaca por primera vez las estrategias que hemos visto a lo largo de casi dos décadas y que este año se han radicalizado en la movilización de los maestros que observamos en la Ciudad de México: bloqueos de carreteras y avenidas, las tomas del aeropuerto y oficinas de Gobierno, marchas masivas y plantones en espacios centrales de la vida pública de las ciudades, como el actual en el Zócalo de la capital del País.

    Los maestros recurrieron a esas estrategias más confrontativas durante los gobiernos de Felipe Calderón y Peña Nieto, pero las suavizaron con López Obrador porque con el líder de Morena establecieron acuerdos políticos y obtuvieron jugosos beneficios. AMLO llamó a la CNTE “vanguardia de la educación pública”. Sin embargo, esa relación ha cambiado radicalmente con el gobierno que preside Claudia Sheinbaum.

    En términos ideológicos, los liderazgos de la CNTE desde sus inicios, pero sobre todo hoy en día, están mucho más a la izquierda de Morena; es más, para las facciones más radicales, sin duda hegemónicas, Morena no es un partido zurdo porque no tiene un programa socialista, aunque para la derecha mexicana, sobre todo para la ultra, lo que propone y hace Morena sí lo es.

    En apariencia, las peticiones de la CNTE son meramente sindicales, pero sus estrategias de movilización van mucho más allá de eso. Estrangular la vialidad y las actividades laborales en varias zonas claves de la ciudad, proponer el boicoteo de las elecciones del 1 de junio, dejar plantada a la Presidenta Sheinbaum, entre otras cosas, tienen la clara intención de debilitar la autoridad del Poder Ejecutivo federal. Pareciera que su objetivo es más político que sindical.

    Así, entonces, el gobierno de la doctora Sheinbaum enfrenta simultáneamente en esta coyuntura al crimen organizado y a la radicalización de la CNTE. Los cárteles cada vez son más agresivos y la coordinadora es mucho más fuerte como oposición política, aunque no electoral, que el PAN y el PRI juntos.

    ¿Hasta dónde va a llegar la CNTE? Si está esperando la solidaridad de la población de la capital para doblegar a Palacio Nacional es que no está leyendo con claridad lo que pasa en esa ciudad. Lo que se observa, más bien, es un hartazgo creciente de los habitantes de la metrópoli por tantos bloqueos y plantones.

    Posdata

    En Mazatlán se celebra una reunión internacional de productores de mango. Ahí, se mencionó que en Sinaloa se desperdicia cerca del 50 por ciento de su producción, entre otras razones porque la gastronomía regional, y la de otras partes de México, no ha incorporado a sus platillos, salvo excepciones, esa exquisita fruta, tal y como existe en otras partes del mundo. ¡Qué pecado!