Educar públicos

ÉTHOS
19/06/2025 04:00

    La Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes está considerada una de las mejores del País, sin embargo, se constata que el público muchas veces no sabe apreciar la calidad y esfuerzo de los músicos. En ocasiones, el público apenas ocupa la mitad del teatro, aun cuando el concierto no tenga ningún costo, además de que los horarios se han adelantado para que los asistentes puedan retirarse a sus casas sin riesgo de sobresaltos.

    Es cierto que da mucho gusto, y llena de esperanza, el observar muchos jóvenes entre los constantes asistentes; no obstante, la educación músical del público es todavía una asignatura pendiente, como lo subrayó el director Enrique Diemecke, en el libro “Enrique Artuto Diemecke. Biografía con música de Mahler”, escrito por José Ángel Leyva: “Hoy existe menos gente que asista a las salas de concierto. Hay una crisis de público para este tipo de música”.

    Especificó que, entre los muchos retos de la sociedad actual, se cuenta el que “la valoración mayoritaria de la música parte de una noción de música chatarra, es muy difícil convencer con una propuesta no comercial, ajena a la educación que imponen los medios y a los planes de estudio de las escuelas”.

    Recalcó: “El problema de la música es semejante al de la lectura, los buenos libros, mientras más complejos se venden a cuentagotas; una cosa es cierta, hay lectores y los hay muy exigentes”.

    Por tal motivo, el maestro Diemecke, quien nos honra esta semana como director huésped de la OSSLA; concluyó: “La sensibilización y la educación de nuevos públicos es un trabajo constante, sostenido, porque en países como el nuestro siempre hay el peligro de perder la escasa asistencia y la modesta recaudación”.

    ¿Estoy educado musicalmente? ¿Comparto mi gusto a jóvenes que disfruten la buena música?