El día internacional del turismo
y su conmemoración en Mazatlán

ENTRE COLUMNAS
29/09/2025 04:00
    La conmemoración del Día Internacional del Turismo en Mazatlán no solo rindió homenaje al pasado de la Escuela de Turismo, sino que abrió una ventana hacia el futuro, planteando el reto de convertir la riqueza cultural sinaloense en un verdadero motor para el turismo sostenible.

    El pasado 22 de septiembre, la Escuela de Turismo de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) en Mazatlán se sumó a la conmemoración del Día Internacional del Turismo, bajo el lema global propuesto por la OMT: “Turismo y Transformación Sostenible”.

    Esta fecha, más allá de ser una celebración, representa una oportunidad para reflexionar sobre el papel estratégico del turismo en el desarrollo económico, social y cultural de los destinos.

    La jornada coincidió con una efeméride significativa: el 33 aniversario de la fundación de la Escuela de Turismo, institución que ha formado a varias generaciones de profesionales que hoy contribuyen al crecimiento de la industria en la región y el país.

    Para conmemorar ambas ocasiones, se organizó un programa académico y cultural en el Teatro Universitario de la Unidad Regional Sur, cuyo momento central fue la conferencia magistral “Raíces y Sabores de Baja California: patrimonio vivo y recurso turístico”, impartida por mi gran amiga y colega, la Dra. Nora Leticia Bringas Rábago, destacada investigadora del Colegio de la Frontera Norte y miembro del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores (SNII).

    La Dra. Bringas, con una amplia trayectoria en el análisis de los fenómenos turísticos en México, compartió una visión profundamente enriquecedora sobre la manera en que la preservación del patrimonio cultural, en especial el gastronómico, puede convertirse en un motor de identidad y de desarrollo económico.

    En su exposición subrayó cómo la sostenibilidad turística no es únicamente un discurso, sino una práctica que, cuando se lleva a cabo con planeación y visión, puede transformar positivamente los destinos y a sus comunidades.

    El ejemplo ilustrativo que presentó fue el caso de Baja California, cuya gastronomía -reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2014- se ha consolidado como un recurso turístico de gran atractivo, capaz de atraer visitantes nacionales e internacionales. La doctora Bringas participó activamente en este proceso de certificación, lo que le permitió ofrecer un testimonio de primera mano sobre los retos y oportunidades de llevar una cocina regional al escenario global.

    Durante su conferencia, también hizo referencia a Mazatlán y a la enorme riqueza cultural y gastronómica que posee, lanzando una invitación clara y provocadora: impulsar iniciativas que permitan replicar, con sello propio, el camino recorrido por Baja California.

    Destacó que, si aquel estado puede presumir del vino, la ensalada César y la cocina de origen chino, Sinaloa tiene igualmente cartas fuertes que lo distinguen: los mariscos, la cerveza y la música de banda, expresiones culturales nacidas de su historia migrante y de la fusión de tradiciones que lo caracterizan.

    Más allá del festejo académico, la presencia de la Dra. Bringas sirvió para recordar que el turismo no es solo una industria que genera ingresos, sino también un espacio donde se construyen identidades, se preservan tradiciones y se forjan puentes entre culturas.

    En este sentido, la conmemoración del Día Internacional del Turismo en Mazatlán no solo rindió homenaje al pasado de la Escuela de Turismo, sino que abrió una ventana hacia el futuro, planteando el reto de convertir la riqueza cultural sinaloense en un verdadero motor para el turismo sostenible.

    Es cuanto....

    Posdata

    El sábado pasado, 31 profesoras y profesores de la Facultad de Ciencias del Mar y de la Facultad de Ciencias Sociales de la UAS, todas y todos miembros del SNII, publicamos un desplegado en este mismo medio con recomendaciones que consideramos necesarias para una reingeniería institucional de nuestra Alma Mater. El documento fue redactado con total respeto, y en ese mismo tono exigimos también respeto hacia quienes lo firmamos, especialmente por parte de las autoridades universitarias y muy particularmente desde los canales institucionales. Estoy convencido de que en la Universidad deben prevalecer la libertad de expresión, el diálogo, la pluralidad de ideas y el respeto mutuo entre todos sus integrantes.