Dicen que si uno quiere saber si un político miente, solo basta ver si sus labios se están moviendo. Un estudio realizado en el Caltech (Chujun Lin, et al., “Inferring Whether Officials Are Corruptible From Looking At Their Faces”) muestra como la gente puede predecir si un político es honesto con tan solo ver su rostro, y no solamente sus labios.
Una serie de estudios realizados por investigadores de Caltech revelaron que cuando a un grupo de personas se le muestran fotos de políticos desconocidos, éstas pueden determinar si dichos políticos habían estado envueltos en actos de corrupción con tan solo ver su fotografía. Estas personas podían “atinarle” sin saber nada de los políticos o sus carreras. El rasgo facial que correlacionaron con corrupción fue el ancho de sus rostros.
El ancho del rostro, es decir, la proporción entre el eje vertical y el eje horizontal, ha sido uno de los rasgos físicos que la ciencia ha correlacionado con conducta agresiva en los hombres. En otras palabras, hombres con rostros anchos tienen una tendencia a ser más agresivos y amenazadores que hombres con rostros más delgados.
El nuevo estudio de Caltech es el primero en mostrar como un grupo de observadores tienden percibir a los políticos con cara ancha como más corruptibles. No obstante, los investigadores mencionan que esto no quiere decir que los políticos que parecen más corruptos son inherentemente más corruptos que aquellos políticos que parecen más honestos.
Este estudio muestra una conexión entre la apariencia facial y corrupción, pero la razón por la cual los políticos con cara de corrupto son más corruptos puede tener otras explicaciones. Una posibilidad es que un rostro que parece corrupto es más propenso a ser ofrecido sobornos. Otra explicación podría ser que los políticos con cara de tranza no son más corruptos que aquellos con cara de honesto, sino que debido a su fisonomía corrupta, la gente sospecha más de ellos y por ende, son sujetos a más investigaciones que sus contrapartes con rostros menos sospechosos.
Este estudio sería un poco difícil de llevar a cabo en México, no sólo por la falta de políticos honestos, sino también por la falta de políticos sin rostro ancho.
Nuestro país se encuentra mórbido, la clase política es un reflejo de nuestra sociedad. Una nación repleta de gente de rostro ancho, un indicador directo de la obesidad epidémica, y un indicador indirecto de la epidemia de corrupción a todos los niveles de la sociedad.
Bajar de peso no solo representa un beneficio para tu salud y estética corporal, también te veras menos corrupto.