Entre sueño y recuerdo

ÉTHOS
18/06/2025 04:00

    Este jueves y domingo, a las 17:00 y 12:30 horas, la OSSLA, bajo la batuta del maestro Enrique Diemecke, ofrecerá un magnífico concierto en el Teatro Pablo de Villavicencio con atractivo programa: Mamá la Oca, de Maurice Ravel, y la Sinfonía No. 7, de Antonin Dvorak. Entrada libre.

    La primera obra, como se comprende, está basada en los cuentos de Charles Perrault, de 1697. Originalmente, en 1908, se concibió como una pieza para dueto de piano a cuatro manos, pero posteriormente, en 1910, se le añadieron otros cuadros para ser estrenada como suite. Mamá Oca es, simplemente, una mujer del campo que gusta de contar historias.

    La obra inicia con La pavana de la bella durmiente, para continuar con Pulgarcito, La emperatriz de las pagodas, Conversación de la Bella y la Bestia, y el Jardín encantado. Ravel expresó: “El propósito de evocar en esas piezas la poesía de la infancia me llevó naturalmente a simplificar mi manera y a desnudar mi escritura”.

    Dvorak escribió su séptima sinfonía entre diciembre de 1884 y marzo de 1885, por encargo de la Sociedad Filarmónica de Londres. Acababa de presentar en esa ciudad su Stabat Mater con un gran éxito, por lo que se entregó entusiasmado a la composición de su séptima sinfonía.

    Tan exaltado estaba que escribió a uno de sus amigos: “Estoy ocupado ahora con esta sinfonía para Londres, y dondequiera que vaya no puedo pensar en otra cosa. ¡Quiera Dios que esta música checa mueva el mundo!”.

    Aunque no es una sinfonía conocida, como su novena, denominada Desde el nuevo mundo, Dvorak estaba convencido de la grandeza de esta obra, que consideró su mejor creación, aunque la escribió en un periodo triste por la muerte de su madre y de un hijo.

    ¿Sueño y recuerdo?