El segundo concierto de la temporada de la OSSLA es también conducido por el director huésped, Alexander Humala, este jueves 11, a las 18:00 horas, y el domingo 14, a las 12:30 horas, en el Teatro Pablo de Villavicencio. Este concierto lleva el título “De Polonia a Viena”. La entrada es libre.
Comienza con la Pequeña Suite, del compositor polaco, Witold Lutosławski, quien nació en Varsovia el 25 de enero de 1913. La Pequeña suite nos recuerda las canciones folclóricas de su patria, tantas veces vilipendiada por la ocupación extranjera, ya fuera Alemania o Rusia. La obra incluye cuatro partes: Piccolo, Polka Hurra, Canción y Danza.
La segunda obra es la Sinfonía No. 4 de Beethoven, la cual no ha sido apreciada debido a que ocupa una posición intermedia entre dos colosales composiciones, la Tercera o Eroica, y la famosísima Quinta o del Destino.
En efecto, Robert Schumann señaló que la cuarta sinfonía es “una doncella griega entre dos gigantes nórdicos”. Algunos críticos dicen que es una de las mejores sinfonías de Beethoven, junto con la Octava.
Finalmente, el programa concluye con una soberbia pieza compuesta por Franz Lizst en 1854, Los Preludios, que es uno de sus más bellos y sugestivos poemas sinfónicos, basado en gran parte en la poesía de Alphonse de Lamartine, como indicó el mismo Lizst:
“¿Qué es nuestra vida sino una serie de preludios de esa canción desconocida cuya primera nota solemne es tocada por la muerte? El amanecer encantado de toda vida es el amor. ¿Pero dónde está el destino en cuyas primeras deliciosas alegrías no se rompe alguna tormenta?... ¿Y qué alma tan cruelmente herida, cuando la tempestad se desata, no busca descansar sus recuerdos en la agradable calma de la vida pastoral?”
¿Preludio la grandeza en mi pequeñez?