La ira y el odio contra la independencia y la pluralidad

    Quisiera que alguien me dijera, tan solo contando el número de titulares o de editoriales institucionales a lo largo de los últimos 30 años, si este diario ha dejado de ser independiente y crítico con todos los gobiernos federales y los estatales de Sinaloa, y plural y crítico con todos los partidos políticos.

    Cuando nació el diario Noroeste en 1973 estaba claramente identificado con el Partido Acción Nacional, eso lo he escrito muchas veces en este diario e incluso en trabajos académicos. Para nadie es un secreto que así surgió nuestro periódico; pero aun así, era él único medio de comunicación escrito de relevancia en Sinaloa que le brindaba abundante espacio de información a las luchas universitarias dirigidas por las diferentes organizaciones de izquierda que predominaban en la UAS.

    A finales de los ochenta, el diario, bajo la gerencia de Manuel Clouthier Carrillo, y poco tiempo después con la dirección editorial de Jesús Cantú, y desde antes con Joel Díaz Fonseca en Mazatlán, se convirtió en un medio más plural no tan sólo en la difusión de la información diaria sino en el espacio concedido a la opinión. Por ejemplo, la columna diaria “Plaza Pública” de Miguel Ángel Granados Chapa, uno de los periodistas más importantes que ha tenido México, se empezó a publicar en este medio, al igual que otros de gran valía. Al mismo tiempo, comentaristas locales, como es mi caso, también empezamos a colaborar. Yo, a partir de 1988, Rubén Rocha Moya, pocos años después, al igual que Ernesto Hernández Norzagaray, Tere Guerra, Ana Luz López Ruelas, Lorenzo Terán, y varios más.

    Al menos en mi caso, jamás en Noroeste me han censurado una palabra, ni siquiera cuando, como en mi papel de Defensor del Lector de este diario, critiqué a su dirección por la limitada cobertura que daban a las anomalías que emergían en la UAS en la etapa que la empezó a dirigir Héctor Melesio Cuén. Manuel Clouthier me reclamó el por qué yo afirmaba que no se cubría profesionalmente a la UAS y por qué afirmaba que la columna de Antonio Quevedo Susunaga era muy parcial a la gestión de Cuén. Clouthier me reclamó fuertemente pero no censuró nada, y poco después él comprobaría lo que yo sostenía y sabíamos muchísimos universitarios.

    Así pues, Noroeste se abrió a todas las opiniones y orientaciones ideológicas sin censurar a nadie y permitiendo la crítica abierta pero fundamentada a todos los partidos y gobiernos, fuere el sello que fuere. Incluso, sin ninguna condición ha permitido amplias y fuertes, pero siempre respetuosas polémicas entre quienes opinamos diferente en el mismo diario. Así fue cuando polemizamos Rubén Rocha y yo su acercamiento al Gobierno de Jesús Aguilar Padilla, o cuando polemizamos Antonio Orrantia y yo el papel de la izquierda y la derecha en la vida política mexicana.

    Agregaría otro hecho relevante que demuestra la independencia editorial del diario, aun ante uno de sus principales accionistas como es Manuel Clouthier Carrillo. Cuando en 2017 escribí el libro “Juan S. Millán. Auge y declive del Maximato en Sinaloa”, Manuel me criticó severamente, y le respondí que lo que él decía era injusto y sin fundamento cuando afirmaba en un artículo en este diario que yo me había convertido en un escribano del ex Gobernador. Le dije que lo que había escrito en ese libro, salvo las entrevistas hechas al político rosarense, casi en su totalidad lo había publicado en Noroeste cuando él era director y la orientación era muy crítica. De todos los gobernadores de Sinaloa de 1988 a la fecha, fui más incisivo con Juan Millán y Mario López Valdez que con ningún otro. Después de ese agrio intercambio de opiniones entre Clouthier y yo no pasó nada en Noroeste. Yo seguí escribiendo en el diario, y Manuel también. Cada quien escribe lo que la conciencia y razonamiento propios nos dicta.

    Quisiera que alguien me dijera, tan solo contando el número de titulares o de editoriales institucionales a lo largo de los últimos 30 años, si este diario ha dejado de ser independiente y crítico con todos los gobiernos federales y los estatales de Sinaloa, y plural y crítico con todos los partidos políticos.

    Solo el periodismo basura de inocultables tonos morados puede sostener lo contrario, recurriendo a la calumnia, el insulto, la agresión y la mentira infame.

    Ese periodismo, que retrata fielmente a sus patrones, se hace más agresivo en tiempos electorales, tal y como lo vemos en una nueva campaña contra los que hacemos Noroeste: directores, reporteros, cartoneros, columnistas, articulistas y personal administrativo.

    En tiempos de ira y canallas suele aparecer la miseria política y periodística, lo que, dirán algunos, no es para preocuparse tanto. Si ese odio falsario se quedara en eso no habría, quizá, que darle tanta importancia. Pero, cuando vemos que el odio y la mentira pueden convertirse en un poder político en Sinaloa entonces sí hay que sonar fuertemente las alertas.

    La política y el periodismo morados quieren a partir de obtener el 30 por ciento del poder en Sinaloa sentar las bases para saltar sobre todo el estado en 2024. Ya lo anuncian con fanfarrias y trompetas.

    Para la tierra de los once ríos tal posibilidad sería una tragedia y Morena le está dando la mano para que eso sea un escenario realizable.

    Ni en la peor de las pesadillas los luchadores democráticos y de izquierda de muchas décadas pudieron imaginarse que el objetivo de una sociedad más justa, tolerante, honesta y libre pudiera ser echado a la borda por amarrarse con una fuerza política actualmente insignificante en la que sus dirigentes están atrapados por ambiciones ilegítimas, la mentira y el odio.

    Posdata

    Mientras tanto, las mujeres siguen dándonos lecciones de dignidad e inteligencia. Aquí en Mazatlán contemplamos la marcha feminista más nutrida en la historia de la ciudad, y eso que sus organizaciones son muy jóvenes. Cuando voten ¿ustedes creen que lo harían por corruptos y misóginos?

    Periodismo ético, profesional y útil para ti.

    Suscríbete y ayudanos a seguir
    formando ciudadanos.


    Suscríbete
    Regístrate para leer nuestro artículo
    Esto nos ayuda a identificarte mejor al poder ofrecerte información y servicios justo a tus necesidades al recibir ayuda de nuestros anunciantes.


    ¡Regístrate gratis!