Una “ley científica” es la descripción de un fenómeno observable, esta no explica el por qué de la existencia del fenómeno ni su causa. La explicación de un fenómeno se llama “teoría científica”.
Las leyes científicas son basadas en una serie de experimentos u observaciones que describen o predicen un fenómeno natural. Estas son generadas a partir de datos y se desarrollan a través de las matemáticas.
La ley de la atracción es una creencia espiritual en donde los pensamientos positivos o negativos atraen experiencias positivas o negativas, respectivamente, a la vida de una persona. Este dogma se basa en la noción de que las ideas y pensamientos de las personas están hechas de “energía pura” y dichas energías (vibras) son capaces de atraer energías equivalentes que son posteriormente materializadas.
En otras palabras, la ley de la atracción afirma que el universo te traerá dinero, salud y felicidad, lo único que debes de hacer es manifestar tus aspiraciones.
Esta ley tiene sus orígenes en el Siglo 19 con un movimiento espiritual estadounidense llamado “New Thought” (nuevo pensamiento). Esta corriente se describe a sí misma como la sabiduría y filosofía acumulada de culturas antiguas como la griega, romana, egipcia, china, taoísta, védica, hindú, y budista, entre otras; estableciendo una relación entre el pensamiento, la convicción, y la conciencia en la mente humana, así como sus efectos más allá de la mente.
El New Thought se basa principalmente en las enseñanzas de Phineas Quimby, el cual había sufrido de tuberculosis en su juventud en el Siglo 19. En aquella época no existía una cura para la tuberculosis. Quimby describió que después de cabalgar sentía una emoción intensa que lo aliviaba de sus síntomas. Este método para aplacar sus síntomas y posteriormente su recuperación lo llevó al estudio de lo que hoy se conoce como “mente sobre materia”, precursora de la ley de atracción.
La ley de atracción cobró un nuevo aire y más seguidores después del documental “The Secret” (El Secreto, basado en el libro) en el 2006, el cual desafortunadamente tuve que ver para poder escribir esto. Este “documental” es una aberración sin sentido ni sustento científico que repite una y otra vez un “mensaje” como si fuera un infomercial de noventa minutos.
Posteriormente salió una secuela llamada “The Power” (El Poder) en el 2010, en donde se postula que la ley de atracción es la ley del amor. La versión modernizada de la ley de la atracción se conoce como “manifestación”.
La ley de atracción es una pseudociencia metafísica (una de tantas que están de moda) con conclusiones basadas en asunciones erróneas y sin fundamento. Esta asume que uno es completamente responsable de cualquier meta u objetivo que no se realice, sin importar lo irreal o descabellado que esta sea.
Este fenómeno se llama “apofenia”, la creencia de que existe un significado detrás de datos aleatorios o conexiones entre sucesos sin relación alguna (como terremotos).
Sin duda alguna, una buena actitud y pensamientos positivos son benéficos para cualquier persona; no obstante, la ley de la atracción es una moda “new age” con muchas similitudes a la famosa frase “el pobre es pobre porque quiere”.