En una colaboración pasada les dije que, según mis cálculos, Morena iba a lanzar al Químico a la “reelección”, pero vía el PAS y ... le atiné.

    Entendamos una cosa. Los partidos políticos no están para cumplir los principios que los rigen y que llevan a sus militantes a afiliarse a ellos y luchar por sus ideales. Respeto y admiro mucho a los militantes que así lo creen y dejan el alma y la piel por sus partidos, pero mi opinión sigue siendo la misma y basada en los hechos.

    Los partidos políticos son negocios de unos cuantos y la moneda de cambio es el poder. Por el poder son capaces de hacer alianzas impensables, traicionar ideales, desdecirse y dejar colgados de la brocha y con el corazón destrozado a sus militantes.

    La jugada de Morena y el PAS para poder lograr la “reelección” del Químico era obvia y burda. Ya expliqué en la colaboración anterior que por las sentencias que tiene encima el Químico por violencia de género, para Morena sería difícil sacar adelante su reelección directa.

    Por eso “dejaron” en manos del PAS la decisión de quien sería su candidato a Alcalde de Mazatlán en una maniobra cínica y deshonesta. La decisión estaba tomada desde que se materializó la alianza, eso hasta un ciego lo puede ver.

    Otra cosa es si la maniobra que se acaban de aventar Morena y el PAS resistirá los ataques en los tribunales electorales, que cualquier afectado por la decisión pueda intentar.

    Sería un juicio interesante y donde puede venirse abajo la pretendida “reelección” del Químico. Es más, ya entrando en la paranoia, hasta puede ser que Morena y el PAS le están tendiendo la cama al Químico a sabiendas que su candidatura será echada abajo en tribunales.

    Si eso sucede, los dos partidos se lavarán las manos y tendrán una excusa perfecta para darle al Químico: “No fuimos nosotros, fueron los tribunales”.

    Otra cosa interesante de lo que acaba de pasar, y eso si se sostiene en tribunales la candidatura del Químico, es saber de qué están hechos los militantes de Morena que están viendo traicionados los principios de su partido.

    ¿Agacharán la cabeza y aguantarán sin más ni más? ¿O se indignarán, sacarán la casta y castigarán al partido saliéndose en masa o votando por otro candidato?

    Repito, vamos a ver de qué están hechos y ojalá el honor y la dignidad se impongan y le den una merecida lección a un partido que los está tratando con tanto desprecio.

    Por otro lado, supongamos que al final de cuentas las candidaturas queden como van, por lo que parece que los mazatlecos no tenemos muchas opciones.

    ¿El Químico o Pucheta? Válgame, Dios, ni a cuál irle. Los dos comparten la ambición por el poder, la prepotencia y el enriquecimiento a costa del dinero público.

    El servicio público y el bienestar de los mazatlecos solo está en sus discursos. Lo de ellos, lo de ellos, es usar el poder en su beneficio, de sus cuates y patrocinadores.

    Los dos resultaron una gran decepción como alcaldes y ambos enfrentan señalamientos públicos, privados y denuncias por faltas administrativas, entre otras cosas.

    ¿Alternativas? Claro que las tenemos, los mazatlecos siempre hemos sido ejemplo en Sinaloa de rebeldía social y política.

    No le tenemos miedo al cambio y ya sacamos al PRI y al PAN del palacio municipal, y también podemos sacar a Morena y dejar fuera al PAS, si se mantiene la candidatura del Químico.

    No creo en el dicho de “más vale malo conocido, que bueno por conocer”. Eso es conformarse con lo malo y renunciar a buscar lo mejor.

    No tenemos porqué conformarnos con el Químico o con Pucheta, busquemos otras opciones y, si nos convencen y demuestran que podemos confiar en ellos, votemos por la esperanza en lugar de por los mismos. Si ninguno nos convence, entonces vigilemos celosamente al que llegue para amarrarle las manos, incluso si llega aquel por el que lleguemos a votar por aquello de que el poder los marea o vuelve loquitos.

    Mientras tanto, de entre los afectados políticamente (porque solo ellos pueden hacerlo), a ver quién tiene los tamaños para llevar a tribunales la candidatura del Químico y para cuestionar ahí mismo, antes de que sea demasiado tarde, la candidatura de Pucheta.

    En lo personal, no tengo nada contra los dos, pero como servidores públicos tengo mucho qué reclamarles y desde mi trinchera los he denunciado y he llevado a cabo acciones legales en contra de ambos, como lo seguiré haciendo en contra de quien se siente en esa silla, si considero que está utilizando el poder corrupta, abusiva y pendejamente, con el solo afán de robarse el dinero público y hacer negocios para sus familiares y cuates.

    Creo que los mazatlecos nos merecemos más que solo ese par de personajes ¿usted no?

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